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FITIM participa de reunión de la OIT y pone énfasis en la situación de los Mineros Mexicanos

7 enero, 2011El Representante Regional de la FITIM en América Latina y el Caribe destacó el incumplimiento de las empresas en la libertad sindical y el impacto de la precarización del trabajo. Asimismo solicitó una mayor cooperación de la OIT para avanzar hacia el fortalecimiento de la negociación colectiva por rama a nivel nacional y mundial.

Chile. Representantes de gobiernos, trabajadores y empleadores de más de 30 países americanos se reunieron en Santiago de Chile, en la 17ª Reunión Regional Americana de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la cual concluyó con un llamado a profundizar los esfuerzos para seguir avanzando en la senda del trabajo decente en el continente.

Los delegados destacaron la necesidad de avanzar en trabajo decente; El fortalecimiento del respeto de la libertad sindical y la negociación colectiva; La promoción de la ratificación del Convenio 102 de la OIT sobre la seguridad social; El fomento de la competitividad de la economía con cohesión social, preservando y respetando los derechos fundamentales en el trabajo; El fortalecimiento de la institucionalidad del mercado de trabajo.

En el encuentro, Jorge Almeida, Representante Regional de la FITIM, hizo una ponencia donde destacó tres temas: la Precarización laboral, Libertad Sindical y Negociación Colectiva. Y en donde sugirió:

1.- Una articulación de las directrices de la OCDE con la Declaración Tripartita de la OIT, teniendo en cuenta los Convenios  explicitados en esta última.

2.-Un mayor apoyo técnico y cooperación de la OIT para avanzar en estudios sectoriales, para el fortalecimiento de la Negociación Colectiva por rama de actividad a nivel nacional y supranacional (AMI).

3.-Llama la atención que no hay un estudio sobre las nuevas formas de organización de la ETN a nivel global y regional, con los nuevos procesos productivos y su impacto en la precarización (caso de la tercerización) e incumplimiento de la libertad sindical Convenio 87 de la OIT (caso Grupo México con el Sindicato Nacional Minero Mexicano).

"Tenemos la posibilidad de elaborar un documento de consenso pensando en los próximos 4 años y a estos como un tiempo de oportunidades para el trabajo decente en las Américas, malograr esta posibilidad pensando en degradar las condiciones de trabajos marcarán un camino que profundizará la precarización  la explotación y la conflictividad", señaló Almeida.

Agregó que la Libertad Sindical debe preservarse como un valor absoluto de la democracia sindical y como un derecho irrenunciable de las organizaciones libres independientes y democráticas. Y la Negociación Colectiva, debe ser considerada como un instrumento fundamental para regular las relaciones de trabajo, resolver los problemas en el lugar de trabajo y distribuir los beneficios del proceso de trabajo. Su impacto va mucho más allá del lugar de trabajo y afecta  a las condiciones de vida y las perspectivas de desarrollo de las comunidades, razón por la cual no puede ser menoscabada.

Asimismo resaltó la situación de los mineros mexicanos, vinculándola al hecho de que muchas empresas no realizan ningún tipo de inversión en materia de salud y seguridad en el trabajo e incluso violan la libertad sindical, "como en el caso de Grupo México que a poco de cumplir el próximo 19 de febrero, 5 años del homicidio industrial ocurrido en la mina de Pasta de Conchos, en la cual aún permanecen los restos de 63 trabajadores", dijo Almeida. Agregó que el gobierno mexicano y Grupo México, violan la autonomía sindical del Sindicato Nacional Minero Mexicano y también de la propia legislación mexicana que impiden la libertad sindical.

Explicó también que la FITIM ha presentado ante la OIT dos denuncias: en 2006 con relación a las actitudes antisindicales de Grupo México contra el Sindicato Nacional Minero Mexicano y la segunda en 2009, relativa a los contratos de protección y la toma de nota como elementos condicionantes de la libertad sindical y requiriendo a la OIT que pida al gobierno de  México que incorpore debidamente el convenio número 87 de la OIT en la legislación nacional y que fomente las estructuras democráticas en las relaciones de trabajo de ese país.