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2.6 Confusión en el sistema del comercio mundial

31 agosto, 2009

Con excesiva frecuencia, los gobiernos dan prioridad a los intereses de las ETN sobre los intereses de los trabajadores, como se desprende claramente en lo relativo a las cuestiones comerciales. No es sorprendente que el actual sistema del comercio mundial siga demostrando su incapacidad para resolver la cuestión del desarrollo sostenible y abordar las necesidades de los trabajadores mundiales. Los sindicatos se oponen enérgicamente a las actuales propuestas de mayor liberalización del comercio de productos manufacturados, porque reducirían las perspectivas de progreso en muchas economías en desarrollo y debilitarían a los trabajadores con respecto al capital multinacional en las economías en desarrollo y desarrolladas. En tanto que el multilateralismo está en crisis, hay una proliferación de acuerdos comerciales bilaterales y regionales que, en la mayoría de los casos, se han negociado sin ninguna consulta ni aportación de los sindicatos.

Las prácticas comerciales desleales y la oposición de los gobiernos a incorporar las normas fundamentales del trabajo de manera exigible en los acuerdos sobre comercio e inversión intensifican las actuales tensiones sobre el sistema multilateral. El comercio puede ser un motor del desarrollo económico y social, pero para ello hay que cambiar fundamentalmente las actuales políticas y prácticas. Las violaciones de las normas fundamentales del trabajo no sólo son una afrenta para los derechos humanos, sino también una distorsión económica. No difieren de las distorsiones causadas por subvenciones injustas o violaciones de los derechos de propiedad intelectual, que están sometidas a sanciones de la OMC.

Con la creciente participación de China en el comercio internacional han aumentado las presiones competitivas sobre los trabajadores en los países desarrollados y en desarrollo, y el incumplimiento de las normas fundamentales del trabajo. En particular, el impacto para el desarrollo de su intervención en Africa y América Latina, debido a la necesidad de acceder a recursos de energía y minerales para facilitar su rápida industrialización, se ha convertido en un importante motivo de preocupación, lo mismo que su política monetaria.