21 December, 2021Desde mediados de diciembre, las fuerzas armadas de Myanmar han intensificado sus operativos contra la Fuerza de Defensa del Pueblo y la persecución de activistas prodemocracia. Los enfrentamientos entre soldados y civiles han resultado en decenas de víctimas. Miles de personas han sido desplazadas internamente durante ataques de artillería indiscriminados.
Khaing Zar, presidenta de la Federación de Trabajadores Industriales de Myanmar (IWFM), afiliada a IndustriALL, expresó:
“La vida de las personas está en peligro; la gente está huyendo de los ataques sin tener a donde ir. Hay que poner fin a los asesinatos y las torturas cometidos por las fuerzas terroristas; los gobiernos a nivel internacional deben emprender acciones concretas y prestar ayuda humanitaria a través del Gobierno de Unidad Nacional”.
Los sindicatos de Myanmar, tales como la Confederación de Sindicatos de Myanmar (CTUM) y la IWFM, han participado en el movimiento de desobediencia civil y varias huelgas nacionales. Junto con la Alianza Obrera de Myanmar, lanzaron una campaña a favor de sanciones económicas integrales en agosto.
IndustriALL apoya la campaña de sanciones económicas integrales contra el régimen militar, y exhorta a las empresas multinacionales a retirar y detener sus operaciones en Myanmar. El 3.er Congreso de IndustriALL, celebrado en septiembre, adoptó una resolución como apoyo a la lucha por la democracia en este país.
Kemal Özkan, secretario general adjunto de IndustriALL Global Union, declaró:
“Condenamos la violencia masiva cometida por el régimen ilegítimo contra el pueblo de Myanmar. La junta debe poner fin a la violencia de inmediato, tal como lo exigió el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas en noviembre.
IndustriALL exhorta a la comunidad internacional a redoblar las acciones y exigir que se terminen las matanzas masivas. Las Naciones Unidas y la Organización Internacional del Trabajo deben reconocer al Gobierno de Unidad Nacional de Myanmar”.