8 septiembre, 2011El 1 de septiembre, unos 100 sindicatos independientes y democráticos y agrupaciones participaron en dos acciones masivas en Ciudad de México: el "día nacional de mexicanos indignados", y una manifestación ante la cámara baja del Congreso.
MEXICO: Desde primeras horas de la mañana del 1 de septiembre, varias organizaciones trabajaron conjuntamente en el Zocalo, en el centro de Ciudad de México, para presentar un contrainforme anticipándose al quinto informe anual de Calderón a la nación. Por la tarde, representantes de sindicatos, estudiantes y grupos de campesinos se reunieron ante el Congreso y enviaron una delegación de dirigentes de UNT, el SME y Los Mineros, afiliado a la FITIM y a la ICEM, y otros del interior, para exigir un cambio en la orientación del Gobierno, el fin de la persecución de las organizaciones independientes y la criminalización de la protesta social, y dejar en suspenso la reforma de la ley del trabajo y la seguridad.
Lorraine Clewer, del Centro de Solidaridad, AFL-CIO, informa de que las organizaciones marcharon luego hasta el Zocalo, donde se leyó un "contrainforme" ante unas 40.000 personas: El número de pobres ha aumentado en 10 millones durante esta administración, los ingresos reales de las clases trabajadora y media han disminuido en un tercio, el desempleo ha subido a 3 millones, el paro de los jóvenes llega a 7 millones, y ha habido 50.000 muertes y desapariciones como resultado de la lucha contra el narcotráfico desde diciembre de 2006.
Aunque difieren en los detalles, los sindicatos se mostraron unidos durante todo el día, con representantes de la totalidad de los principales sindicatos independientes presentes ante el Congreso y en el Zocalo.
El Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) acampa en el Zocalo desde marzo de 2011 para protestar contra los despidos en masa en el sector eléctrico. Demandan empleos para los más de 16.000 trabajadores que no han aceptado la indemnización de despido, la liberación inmediata de 13 miembros del SME detenidos, el acceso a las cuentas bancarias congeladas del SME y la devolución de cuotas expropiadas, la anulación de las órdenes de detención del secretario general del SME, Martin Esparza Flores, y otros dirigentes del SME, y que las autoridades confirmen el registro de 26 dirigentes sindicales nacionales elegidos recientemente.
Muchos sindicatos y otras organizaciones se han unido a la acampada en el Zocalo. Se estima que unas 1.000 personas están ahora acampadas en la plaza, y se pide que se unan más. Los consumidores de electricidad se manifestarán también contra las subidas de tarifas el 8 de septiembre. El 15 de septiembre los militares planean desfilar en la plaza, pero los manifestantes dicen que no se moverán hasta que se solucione el conflicto del SME, el conflicto de los trabajadores de Mexicana y los conflictos de Los Mineros, y se libere a los sindicalistas encarcelados. Temen que el Gobierno de México intervenga militarmente para evacuar el Zocalo; ya ha habido amenazas y movimientos de camiones del ejército el 2 de septiembre.
Lorraine Clewer, del Centro de Solidaridad, AFL-CIO, informa de que las organizaciones marcharon luego hasta el Zocalo, donde se leyó un "contrainforme" ante unas 40.000 personas: El número de pobres ha aumentado en 10 millones durante esta administración, los ingresos reales de las clases trabajadora y media han disminuido en un tercio, el desempleo ha subido a 3 millones, el paro de los jóvenes llega a 7 millones, y ha habido 50.000 muertes y desapariciones como resultado de la lucha contra el narcotráfico desde diciembre de 2006.
Aunque difieren en los detalles, los sindicatos se mostraron unidos durante todo el día, con representantes de la totalidad de los principales sindicatos independientes presentes ante el Congreso y en el Zocalo.
El Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) acampa en el Zocalo desde marzo de 2011 para protestar contra los despidos en masa en el sector eléctrico. Demandan empleos para los más de 16.000 trabajadores que no han aceptado la indemnización de despido, la liberación inmediata de 13 miembros del SME detenidos, el acceso a las cuentas bancarias congeladas del SME y la devolución de cuotas expropiadas, la anulación de las órdenes de detención del secretario general del SME, Martin Esparza Flores, y otros dirigentes del SME, y que las autoridades confirmen el registro de 26 dirigentes sindicales nacionales elegidos recientemente.
Muchos sindicatos y otras organizaciones se han unido a la acampada en el Zocalo. Se estima que unas 1.000 personas están ahora acampadas en la plaza, y se pide que se unan más. Los consumidores de electricidad se manifestarán también contra las subidas de tarifas el 8 de septiembre. El 15 de septiembre los militares planean desfilar en la plaza, pero los manifestantes dicen que no se moverán hasta que se solucione el conflicto del SME, el conflicto de los trabajadores de Mexicana y los conflictos de Los Mineros, y se libere a los sindicalistas encarcelados. Temen que el Gobierno de México intervenga militarmente para evacuar el Zocalo; ya ha habido amenazas y movimientos de camiones del ejército el 2 de septiembre.