28 junio, 2010Sindicatos de América del Norte se unen en una estrategia para crear solidaridad con los sindicatos que luchan por la autonomía en México.
AMERICA DEL NORTE: El primer foro trinacional para unir a los sindicatos que luchan por la autonomía democrática en México con sindicatos estadounidenses y canadienses se celebró el 20 de junio en Toronto (Canadá). Unos 120 sindicalistas, representantes de ONG y activistas de la sociedad civil canadiense se reunieron en la conferencia de un día "Creación de solidaridad con el movimiento sindical democrático en México".
Como dijo Dave Coles, presidente del Communications, Energy, Paperworkers' (CEP) Union of Canada, la reunión agrupó a líderes sindicales de México que nunca podrían celebrar una reunión similar en su país. Entre esos líderes figuraron Napoleón Gómez Urrutia, el presidente exiliado del Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos y Similares de la República Mexicana (SNTMMSRM), Martín Esparza Flores, del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), Francisco Hernández Juárez, del Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana (STRM), y otros mencionados a continuación.
La conferencia consistió en presentaciones de dos abogados laboralistas de México, que hablaron de los obstáculos institucionales jurídicos y políticos al movimiento sindical libre y democrático en México, y también detallaron los temibles pero comunes contratos de protección, que impiden ejercer los verdaderos derechos sindicales.
La conferencia se centró particularmente en los continuos efectos perjudiciales del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) entre Canadá, México y Estados Unidos, que data ya de 16 años.
Ben Davis del Solidarity Center (Centro de Solidaridad) de Estados Unidos ofreció varios ejemplos inspiradores de cómo el SNTMMSRM, o Los Mineros, sigue organizando a los trabajadores, a pesar de la manifiesta supresión por el Gobierno mexicano. También describió la labor realizada a nivel federal de Estados Unidos para presionar a la administración Obama a fin de que adopte una actitud más firme contra la represión sindical mexicana. Y, a nivel mundial, Davis habló de la labor que se está realizando en la OIT sobre los contratos de protección, y de la presión institucional sobre los accionistas contra Grupo México, el principal protagonista empresarial de Los Mineros.
Jorge Robles, del Frente Auténtico del Trabajo (FAT) mexicano se refirió a las deficiencias inherentes en la actual reforma de la legislación laboral en México, en tanto que Alberto Espinosa Rocha, secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores de General Tire de México (SNTGTM), habló de los perjudiciales efectos del acuerdo de libre comercio.
Espinosa dijo que el TLCAN ha sido "muy malo para México", puesto que se han erosionado los buenos sueldos y beneficios anteriores. Afirmó que tanto en el sector de los neumáticos como en el de las piezas de automóviles "los empleadores suprimen derechos contractuales año tras año".
Espinosa fue despedido en 2003 por oponerse al programa de General Tire durante las negociaciones colectivas, pero siguió siendo activista sindical durante los tres años que estuvo sin trabajo. En 2006 fue readmitido como mecánico de mantenimiento y, en 2008, fue elegido secretario general del SNTGTM.
Al concluir la conferencia, los delegados configuraron un plan estratégico que comprende la inclusión de estrictas protecciones de los trabajadores en el TLCAN, la continuación de la labor sobre los contratos de protección mexicanos, y la labor de solidaridad y campañas sobre luchas sindicales mexicanas específicas.
La conferencia fue patrocinada por varios sindicatos norteamericanos, la FITIM, la Federación Internacional de Sindicatos de Trabajadores de la Química, Energía, Minas e Industrias Diversas (ICEM), y la Union Network International (UNI).