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El agua y la electricidad cortados en Ssangyong Motor

6 agosto, 2009En el interior de la planta, unos 700 trabajadores del autmóvil se encuentran en la más absoluta oscuridad, aislados del mundo exterior, al agotarse las últimas baterías de los teléfonos móviles. Desde hace dos semanas, la policia tiene bloqueado el suministro de alimentos, el abastecimiento de agua y la atención médica, y ataca a los trabajadores con pistolas taser y gas lacrimógeno concentrado lanzado desde helicópteros.

COREA: El trato y los ataques inhumanos de que son objeto unos 700 trabajadores en huelga de brazos caídos en Ssangyong Motor ha conmocionado al mundo, y ha incitado a protestar enérgicamente a Amnistía Internacional, a la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y a los sindicatos itnernacionales, que están llevando a cabo protestas en las representaciones de Ssangyong y en las embajadas coreanas de todo el mundo.

El 2 de agosto, la dirección de Ssangyong Motor rompió las negociaciones y pidió a la policía antidisturbios que atacara el taller de pintura de la planta, donde se encontraban los trabajadores en huelga de brazos caídos desde el 21 de mayo. Los trabajadores se declararon en huelga después de que la compañía ordenara despidos en masa sin notificación al sindicato, lo que constituye una violación del convenio colectivo de los trabajadores.

Según el Sindicato Coreano de Trabajadores Metalúrgicos, el sindicato que representa a los huelguistas y afiliado a la Federación Internacional de Trabajadores de las Industrias Metalúrgicas, en las últimas 24 horas el número de agentes de la policía antidisturbios ha pasado de 3.000 a 4.000 y han cortado toda la electricidad, dejando a los trabajadores en la más absoluta oscuridad y aislados del mundo exterior, sin ninguna posibilidad de utilizar teléfonos móviles o cámaras.

Unos 600 familiares y colegas, que han pasado una noche de vigilia a la luz de las velas a las puertas de la planta, temen por la vida de los trabajadores. La policía lleva dos semanas bloqueando el abastecimiento de agua, el suministro de alimentos y la atención médica a los huelguistas, y ha detenido a familiares, miembros sindicales y médicos que han tratado de aportar suministros. La policía ha disparado con pistolas de descargas eléctricas a los trabajadores, y los helicópteros han seguido bombardeando continuamente la zona de la planta donde se encuentran los huelguistas con gas lacrimógeno muy concentrado, que ha causado heridas y quemaduras de la piel. Los trabajadores no pueden combatir el agente mediante lavado por falta de agua ni pueden tratar sus quemaduras y lesiones.

El 23 de julio, a petición de la FITIM y de la Confederación Sindical Internacional (CSI), la OIT procedió a una intervención urgente, solicitando al Gobierno coreano que se abstuviera de utilizar la fuerza contra manifestantes pacíficos. Amnistía Internacional, uno de los principales defensores de los derechos humanos, ha publicado un comunicado de prensa denunciando el uso de pistolas taser y de gases lacrimógenos, agregando "en ningún caso es admisible que la dirección de una empresa o los agentes del orden público traten de poner fin a una huelga negando a los trabajadores el acceso a necesidades esenciales como la alimentación, el agua o el tratamiento médico urgente".

Afiliados a loa FITIM de todo el mundo han procedido a acciones en apoyo de los trabajadores en huelga. El 27 de junio, la Confederación de Sindicatos de Hong Kong celebró una protesta ante la embajada coreana. Están previstas otras acciones en Brasil, Suiza, Sudáfrica y Estados Unidos. Se pide a todos los afiliados a la FITIM que realicen una acción similar inmediata en las embajadas y consulados de Corea; "es cuestión de vida y muerte," dice el director internacional del KMWU, Hyewon Chong.

ACTUEMOS: Pidamos al Gobierno coreano que suspenda los ataques de la policía antidisturbios contra los trabajadores en huelga de brazos caídos enSsangyong Motors.