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3.3.2 Lucha por la igualdad de derechos

4 septiembre, 2009

Todos los trabajadores deben gozar de los mismos derechos, con independencia de su sexo, edad, nacionalidad, origen étnico, discapacidad, orientación sexual o religión. Sin embargo, empleadores de la industria metalúrgica en muchos países, incluidos altamente industrializados, siguen discriminando impunemente a los trabajadores precisamente por esas razones. La FITIM colaborará con los afiliados para eliminar la discriminación en el lugar de trabajo en todas sus formas. Muchos trabajadores del mundo siguen sometidos a discriminación, lo que les priva de sus derechos a la libertad de asociación y de negociación colectiva. Por eso la FITIM centrará sus esfuerzos en ayudar a los afiliados a elaborar estrategias de organización específicas, por ejemplo, con el fin de mejorar las tasas de sindicación entre las mujeres, los migrantes y los trabajadores jóvenes, en particular en las ZFI donde los derechos laborales siguen siendo objeto de abuso y se reprime el sindicalismo. Existe una clara y urgente necesidad de que los sindicatos consideren si es preciso adoptar nuevos métodos para atender las necesidades y aspiraciones de las trabajadoras, los trabajadores jóvenes y los trabajadores migrantes, grupos que están insuficientemente representados en los sindicatos metalúrgicos, pero que se incorporan cada vez más a la industria. Es indispensable modificar las estructuras, las culturas y las prácticas de los sindicatos que disuaden a esos trabajadores de afiliarse a ellos, para lograr que la igualdad de derechos se extienda a todos los trabajadores.

Según la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, de las Naciones Unidas, hay discriminación cuando las personas con discapacidad no pueden participar como miembros de pleno derecho en la sociedad y si se violan sus derechos humanos y como trabajadores. En particular con respecto a las personas mayores, muchos países tienen que intensificar su lucha contra la discriminación y la exclusión social de los trabajadores de edad avanzada, discapacitados o con mala salud del mercado de trabajo y del perfeccionamiento.

La discriminación también significa que las trabajadoras, los trabajadores migrantes y los trabajadores jóvenes son los más afectados por el empleo precario. Esto alcanza niveles extremos en el caso de los trabajadores migrantes, especialmente cuando la dramática pobreza les priva de protección contra organizaciones sin escrúpulos y a veces criminales que explotan su vulnerabilidad. La FITIM alentará a los afiliados a intercambiar estrategias para establecer contacto con los trabajadores migrantes y organizarlos, y mejorar sus condiciones de trabajo, incluyéndolos en la negociación colectiva.

La doble carga que impone el trabajo doméstico a las mujeres puede llevarlas a situaciones de empleo precario, con adversas consecuencias para sí mismas, sus familias y comunidades. La FITIM concederá prioridad a destacar el desproporcionado impacto que tiene el trabajo precario para las trabajadoras y estimular medidas para abordarlo, centrándose en particular en las diferencias salariales entre hombres y mujeres y a la división por razones de género cuya consecuencia es que se niegue a las mujeres el acceso a mejores empleos.

La representación de las mujeres en todos los niveles de la organización sindical es demasiado baja. Los esfuerzos de los sindicatos por organizar a las trabajadoras tropiezan con estructuras que no incluyen a las mujeres entre los dirigentes. La FITIM seguirá esforzándose con sus afiliados para corregir este desequilibrio y ayudarlos a superar los obstáculos a la representación de las mujeres en sus estructuras sindicales y procesos electorales. Se insistirá en la necesidad de estimular una mayor participación de los trabajadores jóvenes en las estructuras sindicales.

La FITIM:

•·               Ayudará a sus afiliados a encabezar la lucha en el lugar de trabajo contra la discriminación en todas sus formas;

•·               Apoyará las actividades de sindicación de los afiliados en ZFI y estimulará el intercambio de experiencias satisfactorias entre ellos;

•·               Cooperará con la CSI y otras FSI, en particular la Federación Internacional de Trabajadores del Textil, Vestuario y Cuero, para tratar de la falta de organización sindical en las ZFI;

•·               Ayudará a los afiliados a eliminar restricciones que impidan que las personas con discapacidad tengan las mismas oportunidades de empleo en el lugar de trabajo. La FITIM apoyará también programas centrados en cuestiones relativas a las personas con discapacidad en todas las actividades de los sindicatos y de la OIT;

•·               Prestará asistencia a los afiliados para identificar y superar los obstáculos a la igual participación y representación de las mujeres en sus sindicatos;

•·               Seguirá de cerca el impacto del trabajo precario sobre las trabajadoras, los trabajadores migrantes y los trabajadores jóvenes, e informará al respecto, además de alentar a los afiliados a que hagan sus propios análisis del trabajo precario en relación con las mujeres y tomen medidas para reducir la doble carga que representa el trabajo doméstico para las mujeres;

•·               Se asegurará de que las medidas adoptadas para mejorar las condiciones de los trabajadores con empleo precario tienen particularmente en cuenta las necesidades de las trabajadoras, los trabajadores migrantes y los trabajadores jóvenes;

•·               Ofrecerá oportunidades a los afiliados para intercambiar experiencias y estrategias a fin de establecer contacto con los trabajadores migrantes internos y externos y organizarlos, y

•·               Sensibilizará sobre las dificultades que afrontan los jóvenes para hallar un empleo seguro y bien remunerado, así como buenas condiciones de trabajo, y apoyará los esfuerzos de los afiliados para que respondan a ellas.