5 abril, 2010
En la Quinta Reunión de la Red Sindical de Solvay, que se realizó en Critiba, Paraná, Brasil, del 29 al 31 de marzo, el acuerdo principal fue “Extender las fronteras, del Brasil a otros países del Mercosur”.
Al primer día de la reunión de la Red, el Sindicato de Químicos y Petroquímicos de Bahía Blanca, Argentina, se incorporó formalmente a la red multisindical, que ahora se va a llamar la Red Sindical de Solvay en el Mercosur.
Solvay es una empresa del sector de la química, con sede en Bélgica, y ya participaban en la Red los trabajadores de varias plantas de la empresa en el Brasil.
"Los principios que orientan la red son los mismos principios que orientan nuestro propio trabajo sindical” dijo Oscar Strutenberg, del Sindicato de los Químicos y Petroquímicos de Bahía Blanca. “Estamos comprometidos con el trabajo conjunto, de modo que trabajaremos en forma oficial dentro del grupo para promover la Red.”
De hecho, algunos representantes del sindicato argentino ya habían participado en dos reuniones de la Red, pero ahora son miembros oficiales, medida que los otros sindicatos presentes consideraron muy positiva.
“Creo que al incorporarse este sindicato, se pone de manifiesto el crecimiento y la madurez de nuestra red,” dijo el Coordinador de la Red, Juvenil Nunes da Costa, del Sindicato dos Quimicos do ABC, sindicato regional, afiliado a la CUT, del sector de trabajadores de la química en el estado de São Paulo. “Es un paso importante en nuestro proceso, porque se optimiza nuestra alianza internacional al incorporar a sindicatos de la misma empresa que representan a los trabajadores de diferentes países.”
Al incorporarse el sindicato argentino, los sindicatos que incorporaban la Red eran el Sindicato dos Quimicos do ABC, Sindicato dos Trabalhadores da Indústria Química, Petroquímica (el sindicato del sector de la química y plásticos de São Paulo), el Sindicato de Trabajadores Petroleros y Químicos de Osasco, y el Sindicato de Trabajadores Químicos de Paraná.
Los próximos pasos que tomará la red serán la creación de un logotipo, intensificación del intercambio de información, y programación de actividades comunes de los representantes de los trabajadores, incluyendo un posible viaje a la sede de la ICEM en Ginebra, más adelante este año, con el fin de intercambiar ideas sobre cuestiones relacionadas con la eficacia del diálogo social.