12 July, 2017Frente a la administración antisindical de la empresa, la fuerza de trabajo de la planta de Nissan en Canton, Mississippi, lleva más de diez años luchando por el derecho a tener un sindicato. Esta semana, con la ayuda de United Autoworkers, los trabajadores/as presentaron una solicitud formal para elecciones sindicales en esa fábrica.
Esta planta de Nissan, ubicada en Canton, es una de las tres instalaciones de Nissan, incluyendo dos en Tennessee, donde los trabajadores/as no cuentan con la representación de un sindicato. Esta semana, sus empleados/as dieron a conocer planes para realizar una elección de representantes sindicales de los trabajadores/as de oficina, que se realizará desde el 31 de julio al 1o de agosto.
Por su parte, Nina Dumas, de la sección técnica de Nissan, que trabaja en la planta desde hace cinco años, señaló: “Los empleados de Nissan quieren salarios justos para toda la fuerza de trabajo, mejores prestaciones sociales, y que se ponga fin a las cuotas de producción irracionales y condiciones inseguras en Mississippi. La empresa no respeta nuestros derechos. Ya es hora de formar un sindicato en Canton”.
La planta de Canton tiene sombríos antecedentes de abusos laborales, y la National Labour Relations Board (NLRB), agencia del gobierno de Estados Unidos, ha acusado a Nissan de:
- Amenazar, restringir y coaccionar a los empleados en el ejercicio de su derecho a organizar un sindicato
- Amenazar con cerrar la planta si los trabajadores crean un sindicato
- Amenazar con falsificar los registros de los empleados como represalia contra los trabajadores
- Aplicación ilegal de una política de uniformes de la empresa que en efecto prohíbe que los trabajadores lleven camisetas pro-sindicales
McRay Johnson, también técnico de la planta de Canton, con cinco años de trabajo en esa planta, afirmó: “Cuando hablamos para exigir protecciones básicas, Nissan nos amenaza y acosa. Los empleados necesitan y merecen tener representación en el lugar de trabajo”.
Además de la queja de la NLRB, la Administración de Seguridad y Salud Ocupacional de Estados Unidos (OSHA) emitió múltiples demandas contra Nissan por violaciones de las leyes federales de seguridad y salud en Canton. Las demandas más recientes, publicadas en febrero de 2017, señalan que
la empresa no proporcionó empleo y ni un lugar de trabajo sin peligros reconocidos que causaban o podían causar la muerte o lesiones físicas graves a los empleados.
Rosiland Essex, técnica con 14 años de trabajo en Nissan, agregó: “Todos los días, realmente estamos arriesgando nuestras vidas en Nissan. Merecemos algo mejor”.
La administración de la planta de Canton ya ha señalado que no apoya la decisión de los trabajadores/as de buscar representación sindical.
Por otro lado, el Secretario General de IndustriALL Global Union, Valter Sanches, comentó:
“Es un horroroso atropello que a la fuerza de trabajo se le niegue el derecho fundamental de afiliarse a un sindicato. IndustriALL seguirá apoyando la lucha de los trabajadores y trabajadoras. Instamos a Nissan a facilitar estas elecciones sindicales”.
La decisión de los empleados de Nissan de formar un sindicato se produce cuatro meses después de la histórica "Marcha en Mississippi", cuando unos 5.000 trabajadores/as y activistas de derechos civiles se dirigieron a la planta de Canton para exigir que la compañía respete los derechos laborales. La marcha fue organizada por la Mississippi Alliance for Fairness at Nissan (MAFFAN), una coalición de líderes de derechos civiles, ministros y defensores de los trabajadores. También participaron en la marcha el senador estadounidense Bernie Sanders, el Presidente del Sierra Club Aaron Mair, el ex Presidente de la NAACP Cornell William Brooks, el actor Danny Glover y otros.