2 mayo, 2024Del 13 al 17 de mayo, los trabajadores de la fábrica de Mercedes en Alabama, Estados Unidos, la única planta de esta empresa en todo el mundo que carece de representación sindical, votarán por primera vez para afiliarse a un sindicato. Según la legislación estadounidense, se necesita que una mayoría se pronuncie a favor de una elección para que esta se lleve a cabo. En una flagrante falta de respeto por la democracia y los derechos laborales fundamentales, el empleador está utilizando tácticas antisindicales alarmistas para influir en la próxima votación.
Con este fin, se colocaron anuncios que dan a entender que la formación de un sindicato hará que los empleos se trasladen a otro estado, instando a los trabajadores a “pensar en las consecuencias” de afiliarse a un sindicato. En su sitio web, el comité de información de los trabajadores de MBUSI afirma “educar a los empleados sobre la agenda radical y egoísta del UAW”. El mensaje es claro: ahora somos una gran familia, pero si votan por el UAW, ya no lo seremos.
Atle Høie, el secretario general de IndustriALL, expresó:
“La familia parece ser un argumento importante para la empresa en contra del sindicato. No obstante, los trabajadores deben recordar que la familia de la que habla la empresa es patriarcal, en la que el padre recibe todo el dinero y da lo menos posible a sus súbditos. La empresa sabe que, con un sindicato, tendría que negociar la distribución del dinero ganado con una fuerza laboral más poderosa. Por supuesto que no quieren un sindicato, quieren el dinero. Esto no tiene nada que ver con la familia. Una familia es una unidad que se preocupa por ti y que se ocupa de que recibas lo que te corresponde. El enfoque de la empresa es deplorable y no redunda en ningún tipo de beneficio para los trabajadores”.
Esta elección en Alabama sigue a la exitosa victoria de la planta de Volkswagen en Chattanooga en abril, cuando se convirtió en la primera planta en el sur de los Estados Unidos en sindicalizarse a través de una elección desde la década de 1940.
Asimismo, en otra victoria que demuestra la diferencia que hace un sindicato, el 26 de abril, el UAW llegó a un acuerdo tentativo con Daimler Truck. Este incluye un aumento salarial general del 25 % en cuatro años y, por primera vez, una participación en las ganancias y ajustes en función del costo de vida.
“El éxito engendra éxito; los trabajadores de Chattanooga lucharon arduamente y salieron victoriosos. Fueron la última planta de Volkswagen en el mundo en sindicalizarse, pero ahora tendrán voz y voto en su lugar de trabajo. Apoyamos a los trabajadores de Mercedes en Alabama, quienes votarán a finales de este mes para revertir la tendencia en el sur de los Estados Unidos, una región tradicionalmente antisindical”,
declaró Atle Høie.
https://youtu.be/NOHhfadafkU?si=2afqfPjl12n2zuzE