20 febrero, 2014Los trabajadores despedidos de Ansell Lanka han realizado una manifestación en las calles de la zona franca de Biyagama en Sri Lanka, para demostrar que no aflojarán en su exigencia de reincorporarse a sus puestos de trabajo. IndustriALL ha pedido mediación del gobierno después de que el Tribunal Supremo mandó a Ansell alcanzar un acuerdo con el sindicato.
294 trabajadores en Biyagama, una de las zonas francas de Sri Lanka, están sufriendo una vida muy dura. Los trabajadores fueron despedidos en octubre del año pasado cuando realizaban una huelga en apoyo a 11 compañeros de trabajo y sindicalistas que habían sido despedidos de la EMN australiana Ansell, fabricante de guantes quirúrgicos e industriales. Los trabajadores están sufriendo grandes penurias debido a los cuatro meses de desempleo que llevan hasta la fecha.
Athula Kamal, presidente local del Sindicato de Zonas Francas y Servicios Generales (FTZGSEU), organización afiliada a IndustriALL, llevaba más de 20 años trabajando como operador de máquinas en Ansell. En 2013 fue despedido repentinamente. La única razón que se dio para justificar el despido fue por haber declarado a la policía que la administración de la empresa estaba involucrada en la agresión de la que fue víctima cuando fue agredido por dos hombres en motocicleta.
El Comisionado del Trabajo dictaminó que Athula debe ser reintegrado al trabajo. En octubre, cuando la administración se negó a cumplir con dicha orden, los trabajadores declararon una huelga, después de la cual cerca de 300 trabajadores fueron despedidos.
“Hemos iniciado la huelga en forma pacífica”, dice Athula. “Las autoridades han ordenado que Ansell reintegre al personal, pero esta empresa se ha negado a hacerlo. Estamos viviendo ahora la huelga de más larga duración en la historia de Sri Lanka.”
Puyumi Philanka Abeywickrama es una trabajadora de planta y activista sindical. Es una de los 294 trabajadores y trabajadoras que perdieron sus puestos de trabajo e ingresos económicos desde hace ya cuatro meses. La familia sobrevive con el sueldo de su marido, aunque Puyumi dice que en muchos casos ambos jefes de familia, el padre y la madre, eran empleados de Ansell y fueron despedidos. Ahora luchan dramáticamente para poder sobrevivir. Las donaciones que se reciben cubren algunos gastos básicos, como libros escolares para los niños, pero también se han dado casos de falta de dinero para pagar medicamentos, con trágicas consecuencias.
“He trabajado en Ansell desde hace 13 años; otros llevan muchos años más trabajando en esta empresa. Nuestra sangre, sudor y lágrimas aportaron al éxito de esta compañía”, dice Puyumi. “No estamos exigiendo mayores sueldos, simplemente pedimos que nos reintegren al trabajo.”
“No confío en el sistema judicial de este país”, añade Athula. “Pero sí creo en nuestro sindicato y en su fuerza. Allí es donde encuentro inspiración para continuar la lucha. Y vamos a ganar, en nombre de todos los trabajadores y trabajadoras de este país.”
IndustriALL ha lanzado una campaña para exigir que Ansell reintegre a los 294 trabajadores. Hasta la fecha, se han enviado a la dirección de la empresa, por correo electrónico, 11.000 mensajes de protesta. IndustriALL también ha presentado una denuncia contra Ansell ante la OCDE.
Los tribunales inferiores han dictaminado a favor de la reincorporación de los trabajadores despedidos, pero, en vez de esto, el Tribunal Supremo suspendió el juicio, dando instrucciones para que Ansell negociara un acuerdo con el sindicato.
En una reciente visita a Sri Lanka, Jyrki Raina, Secretario General de IndustriALL, se reunió con las autoridades laborales y con el Presidente Mahinda Rajapaksa con el fin de manifestarles la importancia de lograr una solución para la huelga en Ansell y poner fin al sufrimiento que implica para los trabajadores. A principios de febrero, el Ministerio de Trabajo presentó una denuncia contra la empresa por prácticas laborales injustas.
El 16 de febrero, en declaraciones a los trabajadores de Ansell en Biyagama, Jyrki Raina elogió la valentía de los trabajadores, y prometió que IndustriALL continuará apoyándoles:
Es importante que Uds. se mantengan fuertes y unidos”, les dijo. “Estamos informando a los hospitales y centros médicos, que son clientes de Ansell, que están recibiendo guantes sucios fabricados por trabajadores de reemplazo, mientras los trabajadores de planta sufren miserias. Vamos a seguir esta campaña dirigida a Ansell todo el tiempo que sea necesario para lograr una solución justa.