15 mayo, 2019El Sindicato de Trabajadores Metalúrgicos de Corea (KMWU), organización afiliada a IndustriALL Global Union, y grupos de la sociedad civil se han unido para oponerse a la fusión de Hyundai Heavy Industries con Daewoo Shipbuilding and Marine Engineering.
El KMWU se ha unido con grupos de trabajadores/as y de la sociedad civil, oponiéndose a la fusión de Hyundai Heavy Industries (HHI), la mayor empresa de construcción naval del mundo, con Daewoo Shipbuilding and Marine Engineering. Al fusionarse estas dos empresas, se crearía una nueva compañía llamada Korea Shipbuilding and Offshore Engineering (KSOE).
El 8 de marzo se firmó un memorando de entendimiento sobre el acuerdo de fusión por $1,75 mil millones. Esta medida se tomó tras negociaciones secretas entre HHI y el Banco de Desarrollo de Corea, propiedad del estado, que es el accionista mayoritario de Daewoo. El acuerdo debe ser aprobado en una reunión extraordinaria de accionistas que se celebrará el 31 de mayo, fusionando a la mayor empresa de construcción naval del mundo con la segunda empresa del mismo sector en términos de ventas, creando así una corporación con fuerte poder de monopolio que va a dominar el mercado.
El KMWU ha criticado el acuerdo, señalando que es un regalo del gobierno coreano a un chaebol dirigido por la familia de Chung Mong Joon. En lugar de competencia sana, el acuerdo señalado otorgaría a la nueva empresa un 58,5% del mercado mundial de gas natural licuado, un 56,6% de los grandes transportistas de crudo y el 21,2% de los pedidos de barcos pendientes en todo el mundo, distorsionando todo el ecosistema de la construcción naval.
El acuerdo subcontratará el trabajo de producción, así como las deudas de HHI, a una compañía no cotizada, pero conserva el activo de KSOE. El KMWU denunció esto como un plan para eliminar HHI, trasladando las deudas a una entidad que podría reestructurarse a expensas de los trabajadores/as.
Park Geun-tae, presidente de la seccional HHI del KMWU, afirmó:
“Aunque la fuerza de trabajo creó esta compañía con el sudor de nuestra frente, los empresarios quieren llevarse los frutos y dejarnos nada más que los cuescos.
“Vamos a aplicar todas las tácticas posibles para impedir este proceso, incluyendo bloqueo de la junta extraordinaria de accionistas”.
No se permitió la participación de los sindicatos y otras partes interesadas en las negociaciones y temen que la fusión provoque una crisis en la industria de la construcción naval, poniendo en peligro los medios de vida de los trabajadores/as y las comunidades locales en toda la cadena de suministro. La industria de construcción naval de Corea ya ha experimentado severa reestructuración: desde 2014, más de 100.000 trabajadores/as han perdido sus puestos de trabajo. En 2017, durante el proceso de división de HHI, no se reconoció el convenio colectivo del sindicato, sentando un precedente para socavar más todavía la influencia sindical.
Por su parte, Atle Høie, secretario general adjunto de IndustriALL, señaló:
“Esta adquisición se está convirtiendo en un factor negativo que afecta los empleos y el comercio justo a escala mundial. IndustriALL tomará medidas para proteger los derechos de los sindicatos y el diálogo social para la industria mundial de la construcción naval en el interés de un futuro sostenible”.