18 abril, 2019En África Subsahariana, los sindicatos enfrentan recesión económica, desindustrialización y trabajo precario, además de sufrir un alto nivel de desempleo y pobreza. Se registran frecuentes violaciones de los derechos humanos y laborales, incluyendo despidos injustos cuando se cierran las minas y empresas.
Durante una visita de IndustriALL a Nairobi, Kenia, el secretario general de IndustriALL Global Union, Valter Sanches, y el secretario regional, Paule France Ndessomin, se reunieron con los seis sindicatos del país afiliados a IndustriALL para estudiar los problemas que enfrentan los trabajadores y trabajadoras de Kenia, incluyendo el trabajo precario. El trabajo precario predomina en la mayoría de las industrias, incluyendo los sectores automotriz, textil, de la confección, de petróleo y gas, y manufacturero, y pone en peligro la existencia de los sindicatos.
La empresa fabricante de calzado Bata Shoe Company, Total, y Kenya Vehicle Manufacturers (KVM), que ensambla automóviles para Volkswagen, son algunos ejemplos de compañías que aplican contratos de trabajo precario. KVM cuenta con 39 trabajadores y trabajadoras permanentes y más de 300 precarios. A estos últimos se les niega beneficios completos, incluyendo el bono de vacaciones que se garantiza en la legislación laboral. Además, trabajan desde las 8 de la mañana hasta las 5 de la tarde, sin dar tiempo para almorzar.
Los sindicatos están organizando a los trabajadores/as, con el fin de terminar con estos abusos. Los empleadores a menudo responden despidiendo a aquellos trabajadores/as que se hayan afiliado a un sindicato. Los sindicatos han llevado los despidos injustos e ilegales a los tribunales para revertir las decisiones de las empresas.
Las mujeres muchas veces trabajan en condiciones terribles con salarios bajos y se les niega sus derechos de licencia de maternidad; además, se producen frecuentemente casos de acoso sexual y violación.
Por su parte, Rose Omano, presidenta del Consejo de IndustriALL para Mujeres de Kenia, afirmó:
“Pedimos que IndustriALL brinde más apoyo a las actividades de las mujeres, ya que el movimiento laboral de Kenia está muy dominado por los hombres. Los problemas de las mujeres son problemas que deben abordar los sindicatos y se les debe prestar más atención”.
Valter Sanches señaló:
“IndustriALL realiza campañas a nivel mundial contra las multinacionales para mejorar las condiciones de trabajo, logrando aumentos salariales y que se respete la libertad de sindicación. Los sindicatos también deben participar más en la conformación de la legislación de sus respectivos países para que los trabajadores y trabajadoras puedan influir en las políticas que se apliquen”.
Al igual que en la mayoría de los países de África Subsahariana, el sector textil y de la confección en Lesoto emplea principalmente a mujeres, y el acoso sexual es un problema que hay que abordar.
El Sindicato Democrático Independiente de Lesoto (IDUL) se enfrentó al sector patronal a consecuencia de un escándalo de corrupción: se otorgaban contratos de trabajo a cambio de favores sexuales. Este caso de corrupción, que obligó a un gerente de recursos humanos a presentar su renuncia, se produjo en la fábrica de prendas de vestir Nien Hsing. IDUL también luchó empecinadamente, con el apoyo de IndustriALL, para que la empresa Nien Hsing restituyera un convenio colectivo que había suspendido.
En el sector minero, IndustriALL dirigió una carta a Firestone Diamonds, empresa minera de diamantes con sede en el Reino Unido, para recordarles su obligación de respetar los derechos humanos y laborales. La mina Liqhobong de esa compañía en el distrito de Butha-Buthe, en la cordillera de Maluti, impide que el sindicato IDUL tenga acceso a la fábrica para organizar a los trabajadores/as. Es lamentable que esta inaceptable conducta provenga de una compañía que ha ganado fama por excavación de grandes y valiosas piedras preciosas, mientras que los trabajadores/as que las extraen reciben una miseria en recompensa.
“IDUL enfrenta una serie de grandes desafíos: desde trabajo precario, bajos salarios, prácticas laborales injustas y violación de los derechos humanos y laborales, incluyendo el acoso sexual. Las condiciones adversas causadas por el trabajo precario y los empleadores antisindicales no pueden pasar desapercibidas. IndustriALL y nuestra Red Sindical Mundial de Trabajadores del Diamante continuarán apoyando a IDUL”.
Valter Sanches
Los talleres de capacitación sobre maneras de combatir el acoso sexual se llevarán a cabo como parte de la campaña de IndustriALL para poner fin a la violencia de género en el lugar de trabajo.
La unión de los trabajadores y trabajadoras para luchar por sus derechos y por salarios dignos es una tarea primordial para los sindicatos de Eswatini (ex Suazilandia) y de África Subsahariana.
Dirigiéndose a miles de trabajadores/as de la confección en las fábricas de Nhlangano, Valter Sanches dijo:
“Algunos empleadores del sector textil y de la confección tienen mala fama por amenazar a sus trabajadores/as en Eswatini: les dicen que va a eliminar puestos de trabajo, aduciendo que la empresa trasladará la producción a Etiopía.
“A su vez, se amenaza de manera semejante a los trabajadores y trabajadoras de Etiopía, cuando los empleadores dicen que piensan trasladarse a Bangladesh. Las empresas hacen esto para pagar salarios bajos, pero no aceptaremos estas maniobras. IndustriALL emprenderá esta lucha y es por eso que unimos a trabajadores y trabajadoras de Eswatini, Lesoto y Sudáfrica. Si luchamos juntos, vamos a triunfar”.
Los afiliados de Eswatini señalaron que son “atacados desde varios frentes”. Agradecieron la solidaridad internacional y se comprometieron a "enfrentar la tarea de desarrollar una fuerza laboral unida y sólida”.
El Sindicato de Trabajadores de Mantenimiento del Suministro de Electricidad y Afines de Suazilandia está luchando por la reincorporación de cuatro trabajadores/as despedidos y contra la suspensión de 13 trabajadores/as por la eSwatini Electricity Company. Estos trabajadores/as fueron suspendidos por haber participado en una huelga.
El Sindicato Unificado de Suazilandia (ATUSWA) está luchando contra la victimización de sus miembros. Por ejemplo, se sabe que una fábrica de Fashion International en Matsapha baja el rango laboral de los dirigentes sindicales o amenaza a los que se afilian al sindicato. ATUSWA también enfrenta amenazas legales de prohibición o que le quiten su registro oficial como sindicato.