5 febrero, 2020Los trabajadores afiliados a la Federación Única de Petroleros (FUP) desarrollan una huelga nacional indefinida. Rechazan los 1000 despidos en la Fábrica de Fertilizantes de Nitrógeno (Fafen, de Petrobras) y su inminente cierre.
La FUP (que forma parte de la CNQ/CUT, a su vez afiliada a IndustriALL Global Union) inició el 1º de febrero una huelga nacional por tiempo indefinido. El objetivo es defender a los 396 empleados directos y 600 subcontratados que se verán afectados con el cierre de Fafen. Los despidos comenzarían el 14 de febrero.
Con la medida de acción, los trabajadores también denuncian que los despidos masivos violan el Acuerdo Colectivo de Trabajo (ACT) que firmaron en noviembre. En dicho ACT, la empresa se comprometió a no efectuar despidos masivos durante cinco años, sin mantener una negociación previa con los sindicatos. Aún así, Petrobras anunció precipitadamente el despido de los empleados de Fafen-PR, sin debatir con la organización sindical otras alternativas para los trabajadores.
Según la FUP, Fafen no es la única dependencia de Petrobras que atraviesa problemas. En todo el Sistema Petrobras (que incluye subsidiarias y empresas independientes conectadas a la sede) se producen despidos y transferencias masivas del personal.
El gobierno actual del presidente Jair Bolsonaro promueve la privatización y el cierre de unidades estratégicas de Petrobras. La petrolera redujo en 5 años las inversiones en Brasil al 50 por ciento, lo que causó la pérdida de más de 270 mil empleos del Sistema Petrobras, incluidos trabajos propios y subcontratados.
Por ese motivo, los trabajadores de más de 50 unidades del Sistema Petrobras se unieron a la huelga. Además, se llevan a cabo diversas acciones en los 12 estados del país donde opera la petrolera. En Río de Janeiro por ejemplo, la Comisión Permanente de Negociación de la FUP ocupa una habitación de la sede de Petrobras. Exige un diálogo con la gerencia de la compañía, a fin de suspender los despidos y abrir foros de negociación para el cumplimiento del Acuerdo Colectivo.
Por su parte, el Tribunal Superior de Trabajo comunicó el 4 de febrero que, si deciden continuar la huelga, multará con 500 mil reales a los sindicatos de la FUP que posean más de 2000 afiliados y con 250 mil a los más pequeños. A su vez, determinó que el 90 por ciento de la fuerza laboral del Sistema Petrobras debe retornar a sus puestos de trabajo. Aún así, la Federación Única de Petroleros informó que continuará la huelga indefinida y obtuvo el apoyo de la Federación Nacional de Trabajadores del Petróleo (FNP), lo cual ayudará a aumentar el alcance de la medida de acción.
La Co-presidenta del Comité Ejecutivo de IndustriALL, co-coordinadora global del sector de minería de IndustriALL y presidenta de la CNQ/CUT, Lucineide Varjão, dijo:
“La huelga representa un gran desafío para los trabajadores. Tanto el gobierno, como el poder judicial y los principales medios de comunicación intentarán promover la desmovilización y el enfrentamiento de la opinión pública con el la organización sindical. Estamos seguros de que, incluso con toda esta presión, el movimiento sindical proporcionará la respuesta necesaria para defender a los trabajadores.”