8 diciembre, 2015Estudiantes Unidos contra la Explotación (USAS) es una organización única, y sin paralelo, completamente dirigida por estudiantes, que presenta un perfil solidario con los trabajadores y trabajadoras del mundo.
USAS cuenta con miles de miembros en más de 150 colegios y universidades de Estados Unidos y Canadá. Desde hace 19 años, basa su acción en la fuerza colectiva de los estudiantes para promover el cambio, tanto en sus propios países como en el extranjero.
“Aprovechamos el poder que tenemos como estudiantes para obligar a nuestras universidades a poner fin a sus relaciones comerciales con marcas mundiales que violen los derechos de sus trabajadores y trabajadoras en cualquier parte de su cadena de suministro”, así se expresó Morgan Currier, Coordinadora de campañas internacionales y dirigente nacional de USAS.
“Y no hacemos esto en el vacío, sino en solidaridad con los trabajadores y trabajadoras que frecuentemente arriesgan la vida para crear sindicatos en sus fábricas con el fin de lograr mejores y dignos salarios, mejores condiciones de trabajo, y representación en sus lugares de empleo”.
Gracias a las campañas de USAS, 21 universidades se han visto obligadas a suspender sus contratos de compra de mercancías con la VF Corporation, que es el mayor fabricante de ropa de marca en el mundo, por haberse negado a firmar el Acuerdo de Bangladesh sobre Seguridad en la Construcción de Edificios y de Instalaciones de Sistemas contra Incendios.
VF Corporation, que produce North Face, Vans, Jansport, Timberland y otras 32 marcas, adquiere sus productos de 90 fábricas en Bangladesh que a la vez emplean a más de 190.000 trabajadores y trabajadoras de la confección.
Las iniciativas de USAS frecuentemente apoyan, y se vinculan a las campañas de IndustriALL Global Union. Debido a una campaña intensiva realizada por USAS durante más de un año, The Children’s Place se vio obligada a pagar un monto adicional, de US$ 2 millones, al fondo de compensación de Rana Plaza. Inicialmente, esa popular marca de ropa infantil de Estados Unidos pagó US$ 450,000, cantidad muy inferior a la cifra que habían solicitado los sindicatos y las ONG.
Además de su trabajo de solidaridad con el sector laboral de la confección, USAS realiza campañas para obtener mejores salarios y derechos para el personal que labora en los campus universitarios, y para detener la privatización del sistema de educación pública.
USAS, que tiene su sede en Washington D.C., en las oficinas del sindicato United Steelworkers, organización afiliada a IndustriALL, también lleva a cabo campañas de solidaridad en favor de los trabajadores y trabajadoras de Walmart y T-Mobile:
“A nivel nacional estamos organizando campañas junto con personal universitario auxiliar, trabajadores de servicios de alimentos, conserjes, estudiantes de postgrado, y trabajadores y trabajadoras de comida rápida en nuestros campus y en nuestras comunidades, donde se están formando sindicatos, se lucha por mejores contratos, o se realizan campañas para que les paguen US$ 15 la hora”, dice Currier.
A nivel internacional, USAS sigue apoyando a los trabajadores y trabajadoras de Bangladesh, dirigiendo su campaña contra la VF Corporation; ofrece apoyo a quienes laboran en el Golfo; y ha lanzado una nueva campaña llamada Sweatfree Bookstores. Esta campaña pide a las universidades procurar que por lo menos un 30% de lo que se vende en sus librerías provenga de fábricas que paguen salarios dignos, donde se permita libertad de sindicación y un convenio colectivo.
“Nuestro objetivo es lograr que al final, en todo el mundo, los trabajadores y trabajadoras de la confección se hayan afiliado a sindicatos con el fin de recuperar el poder que se encuentra en manos de las grandes marcas de la ropa de vestir que compramos todos los días en los EE.UU. y en nuestras librerías universitarias.
“Conversando con el personal que labora en nuestros campus universitarios y reuniéndonos con los trabajadores y trabajadoras de todo el mundo que producen nuestra ropa colegial, los estudiantes hemos aprendido cómo se vinculan las luchas mancomunadas de trabajadores y trabajadoras y de estudiantes en todas partes”, dice Currier.
Capacitación sindical de estudiantes
Una de las mayores prioridades de USAS es la capacitación de los estudiantes para que después de graduarse se conviertan en activistas y sindicalistas. En los últimos 19 años, un porcentaje muy alto de los estudiantes de USAS son actualmente activistas sindicales o miembros activos de un sindicato.
“Los miembros de USAS no sólo comprenden muy bien por qué el movimiento sindical es tan importante para abordar los problemas de desigualdad racial y económica, sino también cuentan con las herramientas necesarias para hacer frente a esos problemas directamente, organizando sus propias campañas junto a los trabajadores y trabajadoras. Nos consideramos no sólo como una organización que se dedica a campañas contra corporaciones, sino también como el único campo de adiestramiento práctico a nivel universitario para preparar la próxima generación de dirigentes sindicales”, dice Currier.