8 diciembre, 2015Dos de los doce sindicatos afiliados a IndustriALL en Malasia, el EIWU (Sindicato de Trabajadores del Sector de la Energía Eléctrica), y la Coalición EIEU (Coalición de Sindicatos de Empleados del Sector de la Electrónica), han asumido la difícil tarea de sindicalizar a los trabajadores y trabajadoras del sector de la electrónica de ese país que todavía carecen de afiliación sindical.
Durante los últimos 50 años, el producto interno bruto (PIB) de Malasia ha aumentado en un promedio anual de 6,5%, lo cual constituye un récord en la economía de los países asiáticos. Uno de los sectores que más ha aportado a este crecimiento es la electrónica, que está pasando por una época de gran auge.
El trabajo en este sector comenzó en 1972, en Bayan Lepas, la primera zona franca de Malasia, ahora denominada la “Isla Oriental de la Silicona”, que posteriormente se extendió a otros estados del país.
Se estima que ya en 2013, 350.000 personas trabajaban en el sector de la electrónica, se las cuales hasta un 60% eran migrantes, principalmente de Indonesia, pero también de Nepal, Bangladesh, Myanmar, Filipinas, Vietnam, Camboya y la India.
Aunque enfrentan muchos problemas laborales, la mayor parte de estos trabajadores/as actualmente no cuenta con afiliación sindical. Entre los problemas que experimentan se incluyen los elevados honorarios de contratación que deben de pagar, salarios que son bajos, se pagan en forma atrasada, o no se pagan, falta de prestaciones sociales, peligrosas condiciones de trabajo, alojamiento inadecuado, e insuficiente protección jurídica por lo cual resultan fácilmente víctimas de abuso por parte de sus empleadores. Entre un 70% a 80% de estos trabajadores son mujeres.
Legislación sobre reconocimiento sindical
Queriendo cambiar esta situación, el EIWU y la Coalición EIEU, organizaciones afiliadas a IndustriALL, decidieron sindicalizar a aquellos trabajadores y trabajadoras de la electrónica que carecen de afiliación sindical. Sin embargo, estas dos organizaciones enfrentaron inmediatamente dos problemas graves que dificultan sus actividades de sindicalización: las represivas leyes antisindicales y perjudiciales para los trabajadores/as de Malasia, agregando a esto las dificultades lingüísticas al tratar de comunicarse con los trabajadores y trabajadoras migrantes. Otro problema es la escasez de activistas y abogados a tiempo completo, lo cual se une a los problemas relacionados con la estructura financiera de los sindicatos.
Maniyam Poovan, Secretario General del EIWU, explica cuál es el obstáculo principal que enfrentan los sindicatos de Malasia, en relación a lo establecido en la Ley Nacional de Relaciones Laborales:
“Según esta ley, los sindicatos tienen que solicitar reconocimiento a los empleadores, quienes deciden si aceptan o rechazan el reconocimiento oficial, apelando contra el registro sindical ante el Ministerio de Recursos Humanos; si el Ministerio decide no reconocer al sindicato, los miembros del sindicato quedan sin protección contra posibles despidos”.
Se puede obtener reconocimiento sindical en caso que, en una votación secreta, un 50% más 1 de los votos resultara a favor del sindicato. Sin embargo, la ley no exige que se describa la cantidad de votantes, lo que permite a los empleadores manipular el número de votos. Por ejemplo, las empresas pueden agregar al conjunto de votantes trabajadores/as temporales o migrantes que no tienen derecho a voto, pero que por ausencia se consideran haber votado en contra. Esto hace difícil para el sindicato alcanzar la cifra exigida del 50% más 1.
Sin embargo, los sindicatos no se desaniman ante estos problemas. En 2014, tanto la EIEU como el EIWU se incorporaron al proyecto de sindicalización de cinco años que ofrece IndustriALL a los trabajadores/as de la electrónica en la región de ASEAN en el sureste asiático. Se ofreció capacitación sobre estrategias de sindicalización a 600 sindicalistas de organizaciones afiliadas a IndustriALL en Indonesia, Tailandia, Vietnam y Taiwán. Inmediatamente se lograron resultados positivos.
En Malasia, la región norte de la EIEU ha tenido éxito en su campaña de sindicalización, ya que más de 900 trabajadores/as adhirieron al sindicato en una empresa multinacional de la electrónica, a pesar de la fuerte resistencia y tácticas antisindicales que aplicara la administración. Es primera vez que el sindicato ha realizado negociaciones que han establecido un convenio colectivo que incluye a trabajadores y trabajadoras migrantes.
Al describir sus actividades de sindicalización,
Maniyam dice:
“Esta actividad está en curso, independientemente de si tenemos éxito o fracasamos. Identificamos nuevas empresas y tratamos de contactar a las personas que trabajan en ellas. Luego realizamos reuniones para informarles sobre los sindicatos y sus funciones”.
En 2014, se estableció un comité de mujeres constituido por representantes de sindicatos afiliados a IndustriALL Global Union, con el propósito de lograr mayor reconocimiento para el papel que desempeñan las mujeres. Se eligió como Presidenta a Kumari, delegada del EIWU, quien procurará que se estudien los problemas que enfrenta la mujer en esa región, y que figuren entre las prioridades del Consejo de IndustriALL en Malasia.
En junio de este año, IndustriALL celebró una Conferencia Mundial sobre los sectores de la TIC, Electricidad y Electrónica en Malasia. Los principales temas tratados en esta Conferencia fueron la sindicalización y la lucha contra el trabajo precario.