26 septiembre, 2013Delegados sindicales viajaron a mediados de septiembre en misión de solidaridad a la región donde se halla la mina de cobre Grasberg, en Indonesia, donde se registrara un grave accidente que costó la vida de 28 mineros. La mina en cuestión es propiedad de Freeport-McMoran.
Este fatal accidente ocurrió en mayo de este año, a consecuencia del derrumbe del techo de un túnel subterráneo no operacional, en los momentos en que se realizaba una sesión de adiestramiento en la mina. El accidente, que sólo puede calificarse como homicidio industrial, mató a 28 mineros, todos miembros de CEMWU FSPKEP-SPSI. Los días 15 al 18 de septiembre, Andrew Vickers, presidente del sector de la minería de la IndustriALL Global Union, y Secretario General de la CFMEU de Australia, encabezó la señalada misión de solidaridad mundial de alto nivel a Indonesia para prestar apoyo internacional a CEMWU FSPKEP-SPSI.
La misión incluía a delegados de la United Steelworkers of America y del Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros de Sudáfrica. Estuvo también acompañada por Glen Mpufane, Director de la Sección Minería de la IndustriALL Global Union. Durante los tres días, los delegados de la misión se reunieron con la administración de PT Freeport Indonesia, y también con representantes gubernamentales del Ministerio de Energía, Recursos Naturales y Minerales, y del Ministerio de Mano de Obra y Transmigración.
Respecto al accidente, se llevó a cabo una investigación en la que no se permitió que CEMWU (FSPKEP-SPSI) tuviera participación activa. Los resultados de la investigación no podían divulgarse al público, a pesar de que el informe de esa investigación no se clasificó como confidencial. A consecuencia de esto, un abogado de los derechos humanos en Indonesia entabló una demanda en contra de la empresa, aunque se ha pagado indemnización a las familias de las víctimas.
"Nos horrorizamos al saber que la causa del accidente había sido el derrumbe del techo del túnel, debido a fallas de los conductos a lo largo del techo y el deterioro de los tornillos de apoyo en tierra, y por lo tanto no se podía achacar la responsabilidad a nadie", dijo Andrew Vickers.
La conclusión de la misión, que contó con el apoyo de la CEMWU FSPKEP-SPSI, fue que el accidente se había producido por negligencia de la administración. No se ofreció ninguna evidencia de que previamente se hubieran realizado inspecciones, ni evaluaciones de riesgo antes del accidente.
"La misión llegó también a la conclusión de que el accidente estaba demostrando claramente la urgente necesidad de ratificación del Convenio 176 de la OIT en Indonesia. IndustriALL Global Union se compromete a prestar todo su apoyo para acelerar este proceso", dijo Glen Mpufane.