16 abril, 2020En Mauricio, los sindicatos temen que los empleadores tomen ventaja de la pandemia para socavar los derechos y los beneficios de los trabajadores.
El confinamiento en este país comenzó el 20 de marzo y finalizará el 4 de mayo.
En una carta al primer ministro, la Confédération des travailleurs des secteurs public et privé (CTSP), afiliada a IndustriALL Global Union, propuso la introducción de un salario mínimo universal para responder a las necesidades de los trabajadores que perderán sus empleos como resultado de la pandemia. Además, el sindicato quiere que se establezca inmediatamente un foro tripartito nacional de acuerdo con las disposiciones de la Ley de Derechos de los Trabajadores, ya que esto promoverá el diálogo social durante la pandemia.
Reeaz Chutto y Jane Ragoo, el presidente y la secretaria general de la CTSP, respectivamente, expresaron:
“La propuesta del sector privado de impulsar la derogación de algunos artículos de la Ley de Derechos de los Trabajadores (2019) es la peor señal que su gobierno puede enviar a los trabajadores, si es que se le concede su deseo. La introducción de la Ley de Derechos de los Trabajadores no se llevó a cabo para aumentar el gasto corporativo. Los trabajadores la consideran una ley que ha restaurado la justicia social para la clase obrera”.
En Mauricio, los sindicatos están en contra de los intentos de reducir las cantidades pagaderas por los años de servicio bajo el Fondo de Gratificación de Jubilación Transferible y describen esta situación como un “chantaje social” hacia el gobierno por parte de los empleadores, especialmente porque viene acompañado de amenazas de pérdidas de empleo.
Los sindicatos también recomiendan establecer un fondo de solidaridad para apoyar a los trabajadores del sector informal. El sector bancario, los parlamentarios, las empresas y los particulares contribuirán al fondo propuesto. Además, los reembolsos al sector privado por concepto de capacitación se dirigirían al programa de asistencia laboral que brinda apoyo inmediato a los trabajadores despedidos para encontrar otros trabajos o recibir capacitación. El programa también debería beneficiar a los trabajadores contratados y priorizar a los postulantes mauricianos en la asignación de empleos.
Los sindicatos quieren que se modifique la Ley de Salud y Seguridad Operacional para incluir disposiciones respecto al acceso de los trabajadores a instalaciones higiénicas en los lugares de trabajo. Las campañas de sensibilización e higiene básica relativas a la COVID-19 también deberían incluir a los trabajadores migrantes y estar disponibles en sus idiomas nativos.
Paule France Ndessomin, secretaria regional de IndustriALL para África Subsahariana, declaró:
“La pandemia de la COVID-19 nos llama a reinventar el lugar de trabajo en términos de los derechos laborales, la salud y la seguridad, el trabajo decente y el futuro del trabajo después de la pandemia. Es admirable que la CTSP esté tomando esta iniciativa”.