16 abril, 201916 de abril de 2019. Más de 1.000 trabajadores de la planta de Ford-Sollers en Vsevolozhsk (Rusia) serán despedidos en julio de 2019 debido al cierre de la fábrica. Sus sindicatos piden que se mantenga la planta con un nuevo propietario y una justa distribución de los fondos asignados para las indemnizaciones.
El 12 de abril, unos 150 trabajadores de la planta de Ford Sollers, con el respaldo del afiliado a la IndustriALL Global Union el Sindicato Interregional "Asociación de Trabajadores" (ITUWA) y la organización sindical local de Ford celebraron una reunión con los lemas "Ford: discrimina y engaña a los trabajadores en Rusia" y "Gobernador y Alcalde, protejan nuestros derechos".
Los empleados de la planta, situada en la región de Leningrado, no están de acuerdo con el Programa de Despido Voluntario, desarrollado por la dirección local de Ford. Según el ITUWA, 10 directores recibirán una indemnización equivalente a la de 1.000 empleados de la planta.
Los participantes en el programa pueden contar con una indemnización claramente superior a la que se requiere legalmente en Rusia, pero en condiciones que restringen los derechos de los empleados. No deben haber estado ausentes más de cinco días por enfermedad, ni haber sido objeto de sanciones disciplinarias. Además, se deben haber alcanzado los objetivos de producción. Si no se cumple una de estas condiciones antes del 24 de junio, el empleado sólo recibirá tres meses de sueldo. Los activistas sindicales dicen que cualquier empleado puede ser sancionado sin fundamento con medidas disciplinarias y privado de su merecida indemnización.
Igor Temchenko, presidente del ITUWA en la región de Leningrado y San Petersburgo, declara:
“Creemos que el Programa de Despido Voluntario propuesto no asigna justamente fondos para las indemnizaciones. Los directores y gerentes recibirán entre 4 y 10 millones de rublos (61.200 - 153.0000 $ EE.UU.) y los trabajadores entre 400.000 y 1 millón de rublos (6.100 - 15.300 $ EE.UU.). En las negociaciones, desearíamos llegar a una opción aceptable para ambas partes. Sin embargo, el empleador se niega a negociar con los sindicatos."
La dirección de Ford Europa ha rechazado también el diálogo con los sindicatos, alegando que se han asignado fondos suficientes, y que la distribución es un asunto interno de la dirección local de Vsevolozhsk.
Los sindicatos han enviado una carta a la dirección de Ford Motor, con sede en Dearborn (Estados Unidos), incluido Bill Ford, el presidente ejecutivo de la empresa Ford Motor.
Georg Leutert, director de la industria del automóvil en la IndustriALL, dijo:
“El cierre de la planta tendrá consecuencias sociales dramáticas para la ciudad de Vsevolozhsk. Por lo tanto, Ford tiene que actuar rápidamente y reunir a todas las partes interesadas – incluidos los sindicatos – en torno a una mesa e iniciar conversaciones conjuntas que ofrezcan perspectivas sostenibles a los miles de trabajadores y sus familias."
Anteriormente, el 5 de abril, los trabajadores de la planta adoptaron una declaración conjunta, en que se encomienda al comité de empresa de Ford Vsevolozhsk que se dirija al Gobierno de la Federación de Rusia para organizar negociaciones con posibles compradores de la planta de Ford en Vsevolozhsk en las que participen obligatoriamente representantes de los trabajadores, con el compromiso de emplear a todos los que lo deseen en la nueva empresa.
Vadim Borisov, secretario regional de la IndustriALL, comenta:
“Ford y Ford Sollers no tienen ninguna estrategia para el mercado ruso y ahora los trabajadores han de pagar por su incompetencia. Apoyamos las demandas de los sindicatos de pagos justos, y pedimos al Gobierno que asegure que la mayoría de los empleados de Ford Sollers puedan conservar sus empleos en la planta con un nuevo propietario."