17 junio, 2018Miles de trabajadores protestaron frente a las oficinas de Eskom en Johannesburgo el 14 de junio para exigir un aumento salarial del 15 por ciento y rechazar el anuncio de ningún aumento de la empresa estatal de la energía Eskom, que dice que no tiene dinero.
Con el incremento del coste de la vida debido a la subida de impuestos y a los aumentos del precio de los combustibles, los sindicatos de Sudáfrica aducen que Eskom muestra poca preocupación por el bienestar a los trabajadores y de sus familias.
Los afiliados a la IndustriALL Global Union, la National Union of Mineworkers y la National Union of Metalworkers of South Africa, están colaborando para obligar a Eskom a subir los salarios y han prometido mantener las protestas a nivel nacional.
Tras fracasar las negociaciones con Eskom, el problema se someterá a arbitraje en la Comisión de Conciliación, Mediación y Arbitraje, y los sindicatos han recurrido a los piquetes. El ministro de Empresas Públicas, Pravin Gordan, dijo en una reunión con el Congress of South African Trade Unions y otras partes interesadas que se reanudarán las negociaciones salariales.
Los sindicatos, que están en contra de la privatización de la entidad estatal, que produce el 95 por ciento de la electricidad de Sudáfrica, dicen que la mayoría de los problemas de Eskom se deben a los préstamos del FMI y del Banco Mundial, a la mala gestión y a la corrupción, y a la decisión de incorporar a la red nacional a Productores de Energía Independientes. Eskom está implicada en la corrupción en el informe del Estado de captura de Thuli Madonsela, a la sazón protector público.
En abril, el ministro de Energía firmó un acuerdo con 27 Productores de Energía Independientes para producir electricidad a través de fuentes de energía renovables, principalmente solar y eólica. Si bien los sindicatos están de acuerdo en el uso de la energía renovable, dicen que no hay un plan de Transición justa para proteger 92.000 empleos, que se perderían si se cerraran cinco centrales de energía alimentadas por carbón en Mpumalanga. Ese plan implicaría también la formación y absorción de trabajadores en el sector de la energía renovable.
En un comunicado de prensa conjunto, los sindicatos dicen: “Es cierto que Eskom tiene una masa salarial alta, pero eso no es culpa de los trabajadores pobres ni se les puede atribuir a ellos, que son quienes menos cobran”, pues los trabajadores y las comunidades no figuraban entre quienes obtuvieron contratos de energía renovable.
Diana Junquera Curiel, directora de energía de la IndustriALL, dice:
“Es ridículo que Eskom anuncie que los trabajadores no recibirán ningún aumento cuando la inflación está subiendo. Por el contrario, la empresa tiene que negociar con los sindicatos aumentos salariales. También debe haber un diálogo con los sindicatos sobre el plan de Transición justa y sobre los contratos con Productores de Energía Independientes.”