18 abril, 2023Los sindicatos de Myanmar condenan el proyecto MADE in Myanmar (“Hecho en Myanmar”), financiado por la UE, que afirma apoyar al sector de la confección al sustituir a los sindicatos por “representantes de los trabajadores” seleccionados por los empleadores.
La Alianza Multipartita para el Empleo Decente en la Industria de la Moda de Myanmar (MADE in Myanmar, por su nombre en inglés) afirma promover el diálogo social y los mecanismos de negociación colectiva.
Esta iniciativa sostiene respaldar la creación de comités paritarios y la formulación de programas de formación y desarrollo de capacidades para el personal y la dirección de las fábricas con el fin de mejorar la comunicación y la colaboración. Sin embargo, en un país dominado por los militares desde el golpe de Estado de febrero de 2021, un régimen que reprime duramente a los sindicatos, esto es imposible.
En una carta a la Unión Europea, la Alianza Obrera de Myanmar y otros sindicatos expresaron que la prohibición de los sindicatos independientes en el país es un atentado contra la libertad sindical y que MADE in Myanmar asiste a la junta militar en su búsqueda de legitimidad.
IndustriALL Global Union e industriALL Europe también le han escrito a la Unión Europea para expresar su preocupación por esta iniciativa:
“Los empleadores aprovechan la situación política para privar a las y los trabajadores de sus derechos. Continúan las graves violaciones de los derechos humanos y laborales en Myanmar”.
La libertad sindical es un derecho humano y un principio fundamental consagrado por la UE. Por lo tanto, las restricciones impuestas a los sindicatos y el derecho a la negociación colectiva en Myanmar bajo el régimen militar son una grave preocupación que pone en tela de juicio la legitimidad de esta iniciativa.
La carta a la UE también hace hincapié en que:
“Con el apoyo de MADE in Myanmar, las organizaciones no representativas se registran bajo el mecanismo de registro sindical del Consejo Administrativo del Estado (CAE). Mediante la creación de comités de coordinación en el lugar de trabajo —con representantes de los trabajadores aprobados por el empleador— MADE in Myanmar ofrece a los empresarios y al CAE una herramienta de propaganda para crear la impresión de que existe el diálogo social. Esto genera la ilusión de que Myanmar permite la libertad sindical, que los sindicatos son reconocidos y pueden registrarse y pueden funcionar libremente, y que se respetan los derechos laborales”.
Según el informe, encargado por la Iniciativa de Comercio Ético (ETI, por sus siglas en inglés) en septiembre de 2022, es imposible que las marcas que operan en Myanmar ejerzan la diligencia debida y se adhieran a las normas sobre comercio responsable reconocidas a nivel mundial.
El mensaje es muy claro: el movimiento sindical internacional exige a la UE que ponga fin a su apoyo al programa SMART Myanmar/MADE in Myanmar.
“IndustriALL Global Union e industriAll European Trade Union expresan su firme oposición a la pretensión de que MADE in Myanmar protege los derechos laborales, y a sus actividades que apoyan y legitiman al CAE”,
declaró Atle Høie, secretario general de IndustriALL.