9 abril, 2015IndustriALL Global Union y su sindicato mexicano afiliado Los Mineros organizaron una reunión de trabajadoras el 7 de abril de 2015, en la Ciudad de México, en la víspera de la IIa Conferencia Regional de América Latina y el Caribe.
Mónica Veloso, miembro del Comité Ejecutivo de IndustriALL, inaugurando la sesión, recordó a la audiencia que América Latina está alcanzando un importante papel de liderazgo en la representación de las mujeres.
En la reunión señalada, diez mujeres que habían participado en el programa de capacitación sobre dirigencia sindical de Los Mineros denominado "Mineras de acero", tuvieron oportunidad de intercambiar información sobre su experiencia. En las minas de México las mujeres constituyen, como promedio, un 10% de la fuerza laboral.
En la mina de Roca Fosfórica Mexicana (Rofomex), hay cinco mineras que trabajan junto con 1.500 trabajadores mineros. Por otra parte, se informó que en la mina de la empresa Minera Peñasquito, hay 117 mujeres de una plantilla total de 1.579.
Las mujeres hacen el mismo trabajo que los hombres y reciben la misma remuneración y prestaciones sociales, ganando cinco veces el salario mínimo nacional. Creen que su remuneración es mejor que la de las mujeres que trabajan en las zonas francas en el norte de México y que por vía de su labor adquieren habilidades y destrezas prácticas.
Las mujeres también enfrentan otros retos: por ejemplo, hay guarderías infantiles en México, pero por lo general se encuentran muy lejos de los centros mineros. Las mujeres trabajan dos semanas, seguidas con una semana de descanso, porque viven lejos y no pueden ir y volver del trabajo todos los días. Aunque cuentan con viviendas dignas en los campamentos, se ven obligadas a dejar a sus hijos con sus abuelas. Los hombres también acogerían con agrado jardines de infancia más accesibles porque entre ellos hay un número significativo de padres solteros.
Dos trabajadoras de ArcelorMittal en Trinidad y Tobago, que participaban en la reunión, explicaron que en la fábrica donde ellas laboran, las mujeres solían trabajar solamente en oficios de administración, pero ahora se hallan en la línea de fabricación de acero. También han conseguido igual salario por el mismo trabajo realizado por los hombres. Aunque en general, se da preferencia a los hombres en la contratación, gracias a las exigencias de los sindicatos, ahora se contrata también a las mujeres. Además, las mujeres enfrentan menos discriminación que antes. A través de los años ha habido una larga historia de acoso sexual. Las mujeres demoran bastante en denunciar las injusticias y para que tomen conciencia de que unidas pueden luchar contra el trato injusto.
En Brasil, la CUT, sindicato que representa a los trabajadores metalúrgicos, está luchando por la igualdad de género. Sus políticas exigen que al menos una mujer debe ser elegida para los cargos máximos de dirigencia sindical, ya sea como presidenta, secretaria general o tesorera.
En su intervención, Mónica Veloso terminó diciendo que “las mujeres tienen que ser protagonistas y activas en sus sindicatos locales”. El verdadero trabajo para lograr una mejor representación de la mujer tiene que realizarse en la base.
Las mujeres congregadas en la señalada ocasión decidieron crear una red regional de mujeres trabajadoras con el fin de informarse mejor sobre la situación en los diferentes y más amplios contextos del mundo laboral, y continuar reafirmándose para conseguir aprobación de sus propuestas.