4 noviembre, 2022La iniciativa para una Transición Justa en el sector energético concluye su primer año con recomendaciones destinadas a garantizar que los sindicatos estén listos para esta transición. La CSI, LO Noruega e IndustriALL han trabajado juntos con el fin de que el movimiento sindical cuente con la información, las herramientas y los planes necesarios para conseguir buenos empleos y una Transición Justa para los trabajadores.
“Esta iniciativa ha dejado en claro que, en muchos lugares, la transición se está llevando a cabo sin tener en cuenta nuestros aportes y que involucrarnos es nuestra responsabilidad. Los puestos de trabajo del mañana deben ser mejores que los del presente. Las acciones a favor de una Transición Justa no van a venir de los empleadores ni del Gobierno. No obstante, si luchamos por una Transición Justa, podremos hacerla realidad para los trabajadores a lo largo de la cadena de suministro”,
expresó Atle Høie, el secretario general de IndustriALL.
Entre abril y octubre de 2022, se celebraron diez reuniones a las que asistieron expertos, confederaciones nacionales y sindicatos del sector energético. Estos encuentros se centraron en el significado del cero neto para los empleos de esta industria. Los participantes se reunieron desde todas partes del mundo para intercambiar información sobre las tecnologías emergentes y el panorama de la transición en diferentes rincones del planeta, así como sobre las estrategias de los sindicatos para garantizar buenos empleos y una Transición Justa.
Talleres nacionales y sobre tecnología celebrados en 2022:
- Hidrógeno
- Tecnología eólica marina y terrestre
- Solar, fotovoltaica y de baterías
- Captura y almacenamiento de carbono (CAC)
- Europa y América
- Australia, Indonesia, Irak, Japón, Nueva Zelanda, Nigeria, Sudáfrica y España
“Los sindicatos tienen un papel importante que desempeñar en la transición hacia un futuro respetuoso con el clima. Esto significa que tenemos que intensificar nuestra actividad principal para representar a los trabajadores tanto en los sectores existentes como en los nuevos. En la jornada inaugural del Congreso de LO Noruega, el gobierno presentó su decisión de establecer un consejo tripartito sobre Transición Justa que comprenda representantes gubernamentales e interlocutores sociales, algo que hemos estado exigiendo desde hace bastante tiempo. Trabajar en estos temas y no rendirse es realmente útil”,
expresó Peggy Hessen Følsvik, presidenta de LO Noruega.
Una de las recomendaciones surgidas en los talleres fue que la iniciativa continúe en 2023, para así seguir proporcionando una plataforma de intercambio que trascienda las fronteras entre los sectores y los sindicatos. En la próxima fase se examinarán temas adicionales, entre ellos la Transición Justa y el sector del petróleo y el gas en la región de Oriente Medio y África del Norte (MENA), así como la tecnología nuclear.
Dado que todas las personas deben poder acceder a empleos limpios, la próxima fase tendrá en cuenta el género y la justicia racial, y se asegurará de que las mujeres, los trabajadores racializados y los jóvenes estén representados en nuestro movimiento y obtengan puestos de trabajo de calidad en la producción de energía limpia.
La iniciativa dejará de centrarse en el intercambio de información para enfocarse en brindar apoyo a los sindicatos para lograr el diálogo social. Los acuerdos de Transición Justa a nivel mundial, diseñados en el marco de las Naciones Unidas, son un aspecto importante de esta iniciativa y pueden ser útiles para promover el diálogo social. Sin embargo, para ser efectivos, necesitarán sindicatos sobre el terreno que representen a los trabajadores de las empresas energéticas multinacionales, el compromiso de los órganos principales de la ONU y un robusto proceso tripartito a través de la OIT.
“Después de más de 15 años, observamos un compromiso con la Transición Justa en el acuerdo climático de París. No obstante, ahora vemos que se apoya a la Transición Justa solo con palabras, pero sin incluir a los sindicatos en la mesa de negociación. Es por esto que los mecanismos, los consejos, los comités, las comisiones y las autoridades en materia de Transición Justa son tan importantes.
Si bien no todas las industrias crearán la misma cantidad de puestos de trabajo, debemos ser optimistas. Sin embargo, en el caso de las industrias pesadas que deben hacer la transición, tendremos de cinco a diez empleos en manufactura por cada diez empleos en energía renovable. Si estos son buenos trabajos, existirá un impacto multiplicador que generará 30-35 puestos de trabajo en el ecosistema más amplio. Al garantizar que todos estos trabajadores estén organizados, podremos construir y sostener comunidades”,
declaró Sharan Burrow, secretaria general de la CSI.