7 junio, 2022Por quinta vez en seis años, se denunciaron las continuas violaciones de los derechos sindicales en Kazajistán ante la Comisión de Aplicación de Normas (CAN) de la OIT durante la Conferencia Internacional del Trabajo en Ginebra.
Desde la tragedia de Zhanaozen en 2011, no ha habido avances sustanciales en materia de derechos sindicales, y Kazajistán sigue evitando cumplir con sus obligaciones en virtud del Convenio 87 de la OIT.
La prohibición efectiva de la formación de sindicatos independientes, la represión de los dirigentes sindicales y la penalización de las huelgas privan a los trabajadores de su derecho a la libertad sindical y a la negociación colectiva, así como crean las condiciones para nuevos conflictos sociales.
Más de 60 grandes huelgas espontáneas llevadas a cabo el año pasado, principalmente en el sector energético y petrolero, junto con las protestas masivas de enero de 2022, donde murieron al menos 160 personas, demuestran claramente que la destrucción y la opresión de las instituciones democráticas generan consecuencias trágicas.
El problema de larga data del registro de la Confederación de Sindicatos Independientes de Kazajistán (KNPRK), que se disolvió en marzo de 2017, y del último afiliado de la KNPRK, el Sindicato de Trabajadores de la Industria del Combustible y la Energía, cuyas actividades se suspendieron en febrero de 2021, aún no se ha resuelto.
La CAN exige que se elimine cualquier obstáculo legal y práctico que impida el registro.
El procedimiento de registro es complejo, lo que sirve para impedir la formación de sindicatos libres e independientes. En la región de Atyrau, el registro de la sección sindical del Sindicato de Trabajadores de la Industria del Combustible y la Energía fue denegado seis veces, cada vez con un motivo diferente. En Almaty, los documentos de registro de la sección sindical fueron rechazados en cuatro ocasiones distintas por supuestas irregularidades en los trámites.
A su vez, la práctica del hostigamiento judicial hacia los dirigentes sindicales no se ha detenido. Los dirigentes sindicales independientes Erlan Baltabay y Larisa Kharkova siguen sin poder participar en actividades públicas, incluidas las actividades sindicales.
La CAN ha exigido repetidamente que se levante la prohibición.
El gobierno de Kazajistán ha anunciado que realizará enmiendas a la legislación para mejorar los derechos humanos para finales de 2022. Sin embargo, el Gobierno excluyó a los sindicatos independientes del grupo de trabajo abocado a esta reforma de la legislación laboral.
En un referéndum celebrado el 5 de junio, la mayoría de los votantes aprobó una serie de reformas constitucionales, lo que significa, entre otras cosas, el retorno a un sistema parlamentario. Existe la necesidad urgente de establecer un diálogo social genuino y de eliminar las barreras jurídicas y prácticas a las que se enfrentan los sindicatos en el ejercicio de la libertad sindical.
Dirigiéndose a la CAN, el secretario general adjunto de IndustriALL, Kemal Özkan, expresó:
“Instamos una vez más al gobierno a tomar todas las medidas necesarias para garantizar que Kazajistán cumpla con sus obligaciones internacionales. El procedimiento de registro sindical debe simplificarse y basarse en la notificación de la creación del sindicato, así como deben levantarse todas las restricciones a la actividad sindical y retirarse todos los cargos contra los dirigentes sindicales, así como sus antecedentes penales”.