24 enero, 2018IndustriALL Global Union hace un llamado a los senadores mexicanos para que voten en contra de las reformas laborales propuestas que promueven la terceización en el país y ponen en peligro la seguridad de los trabajadores
El Gobierno de México y dos sindicatos corporativos presentaron en diciembre su propuesta de reforma secundaria a la Ley Federal del Trabajo. El 1 de febrero reiniciarán los trabajos del Congreso de la Unión y los senadores comenzarán a debatir su posible aprobación.
El secretario general de IndustriALL Global Union, Valter Sanches, le escribió una carta a los senadores el 24 de enero para pedirles que no la voten en el plenario, por el retroceso que significaría en materia de derechos laborales.
“Estas nuevas propuestas contienen cláusulas extremadamente perjudiciales que facilitarían, en forma extrema, la tercerización y consiguiente precarización de las condiciones de trabajo, además de fortalecer—en lugar de eliminar—los odiosos contratos de protección”
dijo Sanches.
El texto elimina los artículos y reglas que actualmente regulan la tercerización, y pone en riesgo la seguridad de los trabajadores. A su vez, la propuesta impide el ejercicio de la libertad sindical y negociación colectiva.
“Considero que la iniciativa de los Senadores de la CTM y de la CROC es una aberración en contra de los derechos laborales, que ni siquiera algunos de los abogados patronales hubieran llevado a este extremo. Por ejemplo, da libertad absoluta a las empresas para contratar trabajadores bajo las reglas de la tercerización y fortalece (en lugar de eliminar) los contratos de protección, que fomentan la explotación del trabajo y la desigualdad en México.
Además, limita, obstaculiza y condiciona la contratación colectiva, el derecho a la huelga y la libertad de asociación, entre muchas otras cosas negativas que contiene ese proyecto de ley”
explicó el presidente del sindicato Los Mineros (afiliado a IndustriALL en México), Napoleón Gómez Urrutia.
La propuesta responde a los intereses de las empresas y de los sindicatos corporativos. Con su aprobación, las compañías tendrían acceso a mano de obra barata y a trabajadores desprotegidos que pueden fácilmente despedir.
Por su parte, los sindicatos corporativos se beneficiarían porque se fortalecen los contratos de protección patronal y se impone un órgano de gobierno para el registro de sindicatos y depósito de contratos colectivos, que estaría controlado tanto por sindicatos oficialistas como patronales.
En las cartas a los senadores mexicanos, Sánches recordó que el llamamiento para democratizar las relaciones laborales, implementar la libertad sindical y acabar con los contratos de protección en México es desde hace años una demanda central de los sindicatos democráticos mexicanos y del movimiento sindical internacional. A su vez, las demandas forman parte de la queja nº 2694 de IndustriALL y de la CSI ante el Comité de Libertad Sindical de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Cada año los representantes del gobierno mexicano y de las centrales corporativas anuncian y prometen ante la Conferencia de la OIT que la Reforma laboral acabará con los contratos de protección y garantizará la plena libertad de asociación y la negociación colectiva. La propuesta presentada por los 2 senadores del PRI (perteneciente a la CTM y a la CROC) en diciembre propone lo opuesto.
Finalmente, Sanches exhortó a los miembros de la Cámara de Senadores del Honorable Congreso de la Unión a que rechacen estas nuevas propuestas de reforma a la Ley Federal del Trabajo y que aprueben leyes secundarias que cumplan con los Convenios internacionales y con las reformas constitucionales que ya fueron aprobadas por unanimidad.