15 noviembre, 2012La fusión prevista entre las gigantescas empresas Glencore y Xstrata se someterá a votación de los accionistas el 20 de noviembre, pues continúa el proceso en el que se evalúan las preocupaciones monopolistas que entraña la fusión.
En tanto que el sindicato europeo está considerando la fusión en términos de su reglamentación antimonopolista, ha aconsejado a Glencore que ceda algunos de sus activos de zinc. En Sudáfrica, si bien la Comisión de la Competencia ha recomendado la aprobación de la fusión, supeditada a determinadas condiciones que ha de cumplir Glencore, el NUM, el NUMSA y la compañía pública de la energía Eskom han presentado solicitudes de intervención impugnando la aprobación recomendada por Competencia. El Tribunal de la Competencia examinará las solicitudes entre el 10 y el 14 de diciembre de 2012.
Glencore encabeza el comercio mundial de varios productos básicos, incluido el carbón, y tiene también participaciones accionariales en la producción minera de carbón y antracita. Xstrata es uno de los mayores exportadores del mundo de carbón térmico y uno de los principales productores de carbón utilizado en la fabricación de acero. En Sudáfrica hay duplicaciones, pues ambas empresas extraen carbón térmico e intervienen en el servicio de comerciantes de carbón para la exportación de su producción.
La IndustriALL Global Union ha condenado públicamente el acuerdo, ha participado en protestas contra él y ha pedido reuniones con Glencore que han sido rechazadas por el director ejecutivo, Ivan Glasenberg.
El National Union of Mineworkers (NUM) planteó preocupaciones a la Comisión, declarando que “Glencore, como enorme productor, probablemente fije precios para todas las empresas deseadas, por oposición a las actuales operaciones individuales en que hay libertad para convenir un precio con un comprador del mineral”. El NUM también se opone al despido de 180 trabajadores que supondría la fusión, y está en descuerdo con que el 50 por ciento de la fuerza de trabajo de las partes en la fusión sean trabajadores subcontratados. Por lo tanto, más de 9.000 trabajadores carecen de seguridad de empleo, y con la fusión están en peligro sus puestos.
Eskom es también muy crítica con Glencore porque se está convirtiendo en el guardián de las exportaciones de carbón de Sudáfrica, y dice que tiene poco interés en desarrollar y mantener el mercado nacional sudafricano. Alega que la filosofía de Glencore es diametralmente opuesta a la de Eskom y al interés público: “Eskom se percata de que la finalidad de Glencore es implantar un factor precio relacionado con el mercado de exportación del carbón”.
El National Union of Metalworkers of South Africa (NUMSA) también ha presentado una solicitud de intervención citando preocupaciones similares al razonamiento de Eskom sobre el mayor riesgo para el suministro y el precio del carbón, reduciendo la capacidad de la compañía pública para generar electricidad en condiciones fiables, estables y sostenibles. El Numsa afirma que la Comisión no ha considerado debidamente los probables riesgos para las industrias transformadoras en la cadena de valor, en particular las que consumen mucha energía.
El Numsa también plantea la cuestión de que el reciente despido de 295 trabajadores en Siltech, una filial de Glencore, fue omitido por las partes deliberadamente para reducir el efecto declarado de la fusión sobre los empleos, y que no fue considerado por la Comisión.
La IndustriALL Global Union apoya al NUMSA, al NUM y a Eskom en sus solicitudes de intervención al Tribunal de la Competencia sudafricano, y desea recordar al Tribunal y a los accionistas de Xstrata que votarán sobre el acuerdo la próxima semana que votar a favor del acuerdo es votar por la Avidez.