15 diciembre, 2019La 25.ª Conferencia de las Partes en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, también conocida como COP25, finalizó formalmente a las 13:55 del domingo 15 de diciembre. Informe del director de sostenibilidad de IndustriALL Global Union, Brian Kohler.
En mi última publicación del blog del 13 de diciembre de 2019, dije que “quizás algunos de los problemas pendientes se habrán resuelto” para el momento en que redacte el último informe. Parece que estaba siendo optimista: en general, el resultado final de la COP25 es decepcionante, incluso considerando algunos resultados positivos.
Lo positivo:
- Las conclusiones reconocen que las CDN deben mejorarse de manera significativa para la COP que se llevará a cabo el próximo año en Glasgow.
- Se aprobó un Plan de Acción sobre el Género, con el objetivo de aumentar la participación de las mujeres en todos los procesos de la CMNUCC y apoyar políticas climáticas con perspectiva de género.
- Existe un plan de trabajo sobre Medidas de Respuesta que abordará la Transición Justa y la creación de trabajo decente y empleos de calidad.
- La colaboración de las ONG en esta COP, incluidos los sindicatos, también fue positiva, tal vez mejor que en cualquier otra de estas instancias a las que he asistido.
Lo no tan positivo:
- Lo peor es que se evitó en gran medida una discusión seria sobre cómo lidiar con lo que ya se ha convertido en una emergencia climática. Australia, Brasil, China, Arabia Saudita y Estados Unidos fueron los que más se resistieron a que se adopte una decisión firme.
- El Artículo 6 no está resuelto: al parecer, varias Partes se encargaron de desviar el debate porque querían tener la posibilidad de utilizar los créditos de emisiones otorgados en virtud del Protocolo de Kioto a las CDN del Acuerdo de París. Dado que hay una gran cantidad de créditos pendientes, esto socavaría seriamente la efectividad del Acuerdo de París. En lo personal, sospecharía que también hay quienes imaginan el mercado de intercambio de emisiones como un lugar donde unos pocos podrían ganar mucho dinero. De todos modos, no se pudo llegar a un acuerdo sobre la protección de los derechos humanos o la integridad del medio ambiente en el marco de un sistema de intercambio de emisiones hipotético, lo que significa que se retomará está discusión nuevamente en Glasgow[S1] . Dado que las diferentes discusiones no pudieron reconocer la necesidad de proteger los derechos humanos y sociales, o incluso de garantizar el progreso desde el punto de vista ambiental, probablemente el hecho de que no se haya llegado a un acuerdo ni adoptado un texto definitivo sea una buena noticia. Claramente es preferible no tener ningún acuerdo sobre el intercambio de emisiones que tener uno que no sea bueno.
- Aunque se han logrado algunos compromisos financieros nuevos, el mecanismo de financiación aún no cuenta con los fondos adecuados, en particular para abordar los problemas referidos a las pérdidas y daños relacionados con el clima. Los objetivos de París no se alcanzarán solo en las CDN de los países ricos; el financiamiento para ayudar a los países más pobres debe ser parte del acuerdo y es parte del compromiso de la CMNUCC.
- Los observadores de la sociedad civil (categoría que incluye delegados sindicales) enfrentaron dificultades cada vez mayores para acceder a los diferentes debates.
Los sindicatos querían una COP con mucha más ambición y con compromisos mucho más fuertes con la Transición Justa, en el ámbito de las discusiones sobre medidas de respuesta climática y en los demás. El hecho de que se haya hecho referencia a la Transición Justa en el Plan de Trabajo sobre Medidas de Respuesta se puede considerar un éxito, pero aún no está claro cómo se realizarán. También destacamos la puesta en marcha de la Iniciativa de Acción Climática para el Empleo, que es una victoria muy importante para los sindicatos, y no se debe olvidar que las palabras de la Transición Justa en el Acuerdo de París permanecerán vigentes. Sin embargo, el progreso en los resultados formales de la COP25 ha sido limitado a pesar de nuestros mejores esfuerzos.
Las Partes perdieron mucho tiempo en debatir sobre trivialidades y esta se transforma en otra oportunidad que no se ha aprovechado completamente. Solo nos queda esperar que la COP26 del próximo año en Glasgow, Escocia, tenga mejores resultados. Es en ese año que se revisarán las Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (CDN). Teniendo esto en consideración, los sindicatos cuentan con un año para presionar a sus respectivos gobiernos para que suscriban a la Iniciativa de Acción Climática para el Empleo e integren medidas de Transición Justa junto con sus CDN.
A continuación se puede leer la declaración final realizada en nombre de los representantes sindicales, a cargo de Francis Stuart, miembro de la Confederación de Sindicatos de Escocia en la sesión de clausura (ya que la COP26 tendrá lugar en Glasgow en 2020).
Estimada presidenta,
Mi nombre es Francis Stuart y formo parte de la Confederación de Sindicatos de Escocia. Hablo en nombre del movimiento mundial de trabajadores, representado por la CSI. Representamos a 207 millones de trabajadores de 165 países.
Lo que hemos presenciado en las últimas dos semanas es una vergüenza. Los sindicatos están muy decepcionados. Esperábamos que los gobiernos acuerden políticas ambiciosas de justicia climática en respuesta a la emergencia climática que amenaza nuestras vidas, empleos, medios de vida, comunidades y nuestra dignidad. Lo que vemos es completamente lo opuesto.
Han bloqueado a la sociedad civil, literalmente, mientras que los gobiernos retroceden en lo que se ha negociado a lo largo de los años. Lo que hemos visto aquí es nada menos que el intento de las Partes de disolver el Acuerdo de París. Están mucho más interesadas en intercambiar emisiones y obtener un rédito de esto que en reducirlas realmente. No hay respeto por la ciencia, no hay respeto por los derechos humanos, no hay justicia social, no hay ambición ni compromisos de acción.
Este fracaso no puede separarse de las crisis de las que somos testigos en todo el mundo.
- Los ricos se enriquecen aún más mientras los pobres sufren y el cambio climático no hace más que exacerbar esta situación.
- Los sindicalistas se ven atacados.
- Los gobiernos, incluido el gobierno chileno, atacan a sus pueblos.
Necesitamos medidas enérgicas y transformadoras por parte de los gobiernos para allanar el camino hacia una Transición Justa. La COP del próximo año se llevará a cabo en Glasgow, mi ciudad natal. Necesitamos ver medidas climáticas para proteger los derechos de los trabajadores y crear empleos decentes.
- Los trabajadores tienen que formar parte de las discusiones para negociar CDN mejoradas, con el fin de que estén listas para su presentación en Glasgow, sin esperar a que otros gobiernos tomen la iniciativa o retrasarse para ver cómo resulta todo;
- Queremos políticas de protección social para las personas que se verán afectadas;
- Y queremos que los países ricos paguen por la financiación climática con la que se han comprometido por muchos años.
Nada de esto se refleja en esta COP.
Esta COP le ha fallado a la gente y al planeta. Poder popular, justicia climática.