13 diciembre, 2019El director de sostenibilidad de IndustriALL, Brian Kohler informa desde la COP25 en su blog.
COP25: el mismo nombre deja en claro que esta conferencia se ha reunido anualmente por 25 años. Ha habido puntos altos —como la COP21 en París, donde se logró el Acuerdo de París; y la COP24 en Katowice, donde se realizó la Declaración de Silesia sobre la Transición Justa— así como puntos bajos, como la COP15 de Copenhague. Aún, después de 25 años de estas instancias, el mundo todavía se encuentra en un camino hacia un cambio climático catastrófico.
El punto alto de estas dos semanas sería la puesta en marcha de la Iniciativa de Acción Climática para el Empleo. La OIT ha dudado por mucho tiempo en tomar un rol de liderazgo en los debates climáticos; pero es esencial que el problema del empleo —el futuro del trabajo en un mundo con restricciones en la emisión de carbono— sea abordado por esta organización. Sin embargo, esta puesta en marcha es un evento secundario, no es parte de las discusiones de la COP25 en sí.
El punto bajo es difícil de señalar; más bien ha habido una suerte de desánimo sobre una gran parte de esta COP. La retirada prometida de EE. UU. del Acuerdo de París ha alentado a algunos otros países (que todavía están adentro) a priorizar el estrecho interés propio y el teatro político por encima del progreso. Esa tendencia pudo haber sido superada con liderazgo eficaz. Lamentablemente, esto ha hecho falta. No debería pasarse por alto que esta COP se está realizando en Madrid, después de que primero Brasil, y luego Chile, incumplieran sus promesas de ser los anfitriones. Esto habla de las políticas de descontento que se están esparciendo en todo el mundo. El hecho de que cantidades sin precedentes de personas estén protestando y reclamando acción climática parece haber escapado a la atención de al menos algunos de los negociadores aquí.
Los siguientes comentarios reflejan la situación tal como la percibo a la tarde del viernes 13 de diciembre. Todavía hay una posibilidad de cambio antes de que finalice esta COP, particularmente dado que ahora hay rumores de que las negociaciones pueden extenderse hasta el sábado, o incluso el domingo.
En el momento de escribir esta entrada del blog, entonces, esta es la situación actual:
* aunque se han realizado algunos compromisos financieros nuevos, el mecanismo de financiamiento todavía no cuenta con los fondos adecuados, en particular para lidiar con los problemas de las pérdidas y el daño relacionados con el clima;
* el Artículo 6 (sistema de intercambio de emisiones de carbono), sigue sin resolverse, no podemos aceptar ningún trato que cree vacíos legales en el Acuerdo de París;
* los problemas que no deberían haber generado controversia, como establecer plazos comunes para la presentación de informes y la acción, se han estancado en discusiones sin sentido;
* los esfuerzos para abordar la perspectiva de género del cambio climático resultaron en un mero mínimo;
* los sindicatos querían mucha más ambición y compromisos mucho más fuertes con la Transición Justa en esta COP, en los debates sobre medidas de respuesta climática y en otros lugares. Logramos que se hiciera referencia a la Transición Justa en el Plan de Trabajo sobre Medidas de Respuesta; pero no hay claridad sobre cómo se realizarán. También tenemos la puesta en marcha de la Iniciativa de Acción Climática para el Empleo, una victoria significativa para los sindicatos; y no se debe olvidar que las palabras de la Transición Justa en el Convenio de París permanecerán vigentes. Sin embargo, el progreso en los resultados formales de la COP25 ha sido limitado a pesar de nuestros mejores esfuerzos.
Entonces, otra oportunidad no se ha utilizado completamente, y solo podemos esperar que la COP26 el año próximo en Glasgow, Escocia, haga un mejor trabajo. Ese es el año en que se revisarán las Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (CDN). Por lo tanto, los sindicatos tienen un año para ejercer presión sobre sus gobiernos para que se adhieran a la Iniciativa de Acción Climática para el Empleo y para que integren medidas de Transición Justa en sus CDN.
La CMNUCC tendrá un gran trabajo por delante para calcular cuánta más ambición se necesita en los CDN de los estados miembro para alcanzar los objetivos de París. En cualquier caso, buscaremos que la COP26 presente la ambición y los compromisos sociales más fuertes, derechos humanos, derechos laborales y Transición Justa que necesitamos en las CDN revisadas.
Pueden haber notado que recientemente EE. UU. ha estado librando una batalla contra la Organización Mundial del Comercio, al negarse a permitir la designación de adjudicadores. Hay múltiples motivos para esto, por supuesto, pero no creo que esto no tenga relación con las negociaciones sobre el cambio climático. Tras su retiro formal del Acuerdo de París el año próximo, EE. UU. —en teoría— sería vulnerable a acusaciones relacionadas con el comercio de que su falta de compromiso con la acción climática radica en un subsidio injusto de sus industrias. Enfrentarse a la OMC haría mucho menos probable que se los haga responsables en esta área. Evitar toda responsabilidad parece ser el motivo.
Este es mi penúltimo informe desde la COP25. El último puede ser mañana, o el domingo, o incluso el lunes, dado que se están extendiendo las negociaciones. Sin embargo, ahora debo irme de Madrid. En cualquier caso, las oportunidades de influir sobre las Partes ahora son muy limitadas dado que la mayoría de las reuniones restantes serán a puertas cerradas. Los sindicatos, junto con otros grupos de la sociedad civil: mujeres, pueblos indígenas, jóvenes, hemos dado lo mejor. Hemos estado bien preparados, hemos levantado nuestra voz, hemos sido fuertes en nuestra lógica, hemos sido apasionados en nuestras convicciones. Cuando se publiquen los resultados oficiales de esta COP, veremos qué tan exitosos hemos sido. Quizás algunos de los problemas no solucionados que enumeré anteriormente se hayan resuelto.
Haré un informe final en ese momento.