20 octubre, 2011La Federación Internacional de Trabajadores de las Industrias Metalúrgicas pide a los gobiernos y a los empresarios que respalden a los trabajadores de la industria siderúrgica para garantizar el éxito futuro. El llamamiento se hace en momentos en que varias compañías importantes anuncian cierres o pérdidas de empleos que pueden debilitar la futura sostenibilidad de la industria siderúrgica. Entre los anuncios recientes figuran la pérdida de 1.300 empleos en BlueScope Steel en Australia, el cierre permanente en Lieja (Bélgica) y la paralización de altos hornos en Florange (Francia) y Eisenhüttenstadt (Alemania) por ArcelorMittal.
Rob Johnston, director ejecutivo, declaró: "A menos que los gobiernos actúen desarrollando políticas industriales que apoyen la continuación de la producción de acero, probablemente haya más anuncios de pérdidas de empleos." "Es fundamental un enfoque tripartito; los trabajadores no pueden salvar a la industria por sí solos, ni deben hacerlo; es preciso tomar medidas para abordar los precios de las materias primas, los costos de la energía y el comercio justo."
Actualmente, tres grandes compañías de materias primas, BHP Billiton, Rio Tinto y Vale controlan el setenta por ciento del mercado de mineral de hierro, y utilizan su posición dominante para imponer los precios de las materias primas. Estos precios han aumentado más del 100 por ciento el pasado año. También, al mismo tiempo que las compañías mineras obtienen beneficios sin precedentes, muchas amenazan a sus trabajadores miserablemente en un intento por maximizar los beneficios, y pisotean los derechos de los trabajadores. La FITIM desea que los gobiernos recuperen algunas de las facultades de las compañías mineras sobre la determinación de precios para que haya un enfoque más sostenible.
Como parte de este proceso, la intervención de los gobiernos ha de ir acompañada de un compromiso a más largo plazo de los empleadores. Las políticas de justicia social y de empleo de larga duración han de formar parte integrante de las estrategias de las empresas. La industria siderúrgica ha de posicionarse para un futuro más brillante, apoyando programas que inviertan en educación, formación y calificaciones profesionales. Retener una mano de obra altamente calificada y segura es la base de una industria exitosa; la obtención de beneficios a corto plazo no es la respuesta. En la industria se está produciendo un cambio, y los trabajadores han de estar preparados, pero también protegidos, pues la participación de los trabajadores es esencial.
Lamentablemente, hasta que se adopten esas medidas, los trabajadores seguirán pagando el precio de la crisis actual. Se seguirán tomando decisiones irresponsables que debilitan el futuro de las industrias manufactureras, y se seguirán cerrando plantas que pueden ser rentables si quienes formulan las políticas ofrecen igualdad de oportunidades.