20 diciembre, 2011En una declaración previa a la Octava Conferencia Ministerial de la Organización Mundial del Comercio (OMC) en Ginebra, del 15 al 17 de diciembre, los sindicatos mundiales hicieron una declaración conjunta criticando a la OMC por no abordar problemas fundamentales, y proponiendo remedios.
MUNDO : El movimiento sindical internacional es unánime en su dura crítica da la OMC: "A pesar de las críticas expresadas por millones de trabajadoras y de trabajadores en el mundo entero, todavía se presta muy poca atención en la OMC al crecimiento equitativo, al desarrollo y a la creación de empleo pleno, decente y productivo, basado en el respeto de los derechos de los trabajadores y otros derechos humanos.
Mientras que los trabajadores y sus familias sufren severos recortes como consecuencia de la actual crisis de la deuda: "La existencia de la OMC no sirve de nada para impedir los crecientes desequilibrios a niveles insostenibles, y muchos países entran en una profunda recesión. El acuerdo que se discute actualmente, que carece de transparencia y se basa en las modalidades de negociación en la OMC de diciembre de 2008 sobre el AMNA y la Agricultura, así como las negociaciones en curso para liberalizar servicios en virtud del AGCS, no ayudarán a que el comercio dé cómo resultado la recuperación económica, la creación de empleo ni un verdadero desarrollo económico."
Los sindicatos mundiales instan a la OMC a negociar un conjunto de medidas para los países menos adelantados, a fin de lograr al menos un resultado positivo para los países más pobres. A juicio de los sindicatos, ese conjunto de medidas debe incluir un acceso a los mercados libre de derechos y de contingentes para todos los productos procedentes de los países menos adelantados. Las subvenciones al algodón se deben eliminar.
Además, en respuesta a los actuales problemas financieros mundiales, la OMC no debe impedir diferentes medidas de reglamentación financiera recomendadas comúnmente, como los controles del capital, las prohibiciones de servicios financieros arriesgados, los límites de tamaño de los bancos y la "barreras de seguridad" entre servicios bancarios y de inversión.
Se pide a todos los afiliados a la CSI que presenten la declaración a sus ministros de Comercio antes de la Octava Conferencia Ministerial de la OMC.
Véase la declaración completa aquí.