12 noviembre, 2010Con motivo de la reunión del G20 en Seúl, el movimiento sindical mundial pide al Gobierno coreano que cumpla sus compromisos internacionales y respete los derechos de los trabajadores.
COREA: El 11 de noviembre, primer día de Cumbre del G20 en Seúl, los sindicatos mundiales celebraron una conferencia de prensa en Seúl para llamar la atención del mundo sobre los continuos abusos de los derechos de los trabajadores en Corea.
El portavoz de los sindicatos mundiales, Ambet Yuson, secretario general de la FITCM, dijo a la prensa local e internacional asistente que el movimiento sindical mundial se toma muy en serio la situación de los derechos laborales en Corea. En una campaña coordinada por la FITIM antes de las reuniones del G20, centenares de sindicalistas de todo el mundo escribieron al presidente coreano, Lee Myung-bak, pidiéndole que su país respete las normas laborales reconocidas internacionalmente y ponga fin a los ataques a los trabajadores y sus sindicatos.
Las actividades antisindicales del Gobierno coreano están bien documentadas. Comprenden despidos, reclamaciones de indemnización masivas contra sindicatos y particulares, arrestos, detenciones, encarcelamientos y agresiones físicas por realizar actividades sindicales que en otros países del G20 no se consideran ilegales.
La conferencia de prensa se centró en tres esferas de continuas violaciones de los derechos laborales en Corea, a saber:
- El uso de sanciones penales en virtud del artículo 314 del Código Penal para detener y encarcelar a sindicalistas por ejercer su derecho legítimo a realizar actividades sindicales.
- La negativa de los derechos de los trabajadores con empleo precario o irregular a unirse a un sindicato y negociar colectivamente, y el uso sistemático por empleadores de contratos de trabajo precario, concretamente para impedir que los trabajadores formen sindicatos y se unan a ellos.
- Discriminación antisindical contra trabajadores del sector público que niega a muchos de ellos el derecho a unirse a un sindicato.
Yuson se refirió a la larga lucha de los trabajadores en Kiryung Electronics por la regularización como trabajadores permanentes a tiempo completo y el reconocimiento de su sindicato, que acabó victoriosamente la semana pasada.
Kim Young-hoon, presidente de la KCTU, dijo en la conferencia de prensa: "Corea debe dejar de firmar acuerdos comerciales y empezar a firmar convenios de la OIT que garantizan los derechos fundamentales de los trabajadores."
Kim Ju-young, vicepresidente de la FKTU, también habló en la conferencia de prensa, y dijo: "Corea ha de cumplir las promesas que ha hecho a los organismos internacionales. Los trabajadores irregulares son los que más necesitan garantías de los derechos laborales, porque son los derechos que más se atropellan."
El Gobierno coreano está utilizando su papel de anfitrión de las reuniones del G20 como escaparate de su prominencia y liderazgo en la escena internacional, pero los sindicatos mundiales señalan que no se puede reconocer realmente al Gobierno como líder internacional mientras siga aplicando medidas represivas contra los trabajadores y los sindicatos.
Aunque no se concedió a los sindicatos mundiales una entevista con el ministro de Trabajo coreano, representantes sindicales en la Cumbre del G20 se reunieron con el presidente coreano, quien les dio seguridades de que el ministro de Trabajo se mostrará dispuesto a discutir las cuestiones de los derechos laborales con la KCTU y la FKTU después de la Cumbre del G20.
Hablando en nombre de los sindicatos mundiales, Yuson concluyó diciendo a los medios de información asistentes que pueden "estar seguros de que los sindicatos mundiales seguirán apoyando la lucha de los sindicatos coreanos por los derechos de los trabajadores hasta que se ponga fin a la violencia y la represión".