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Los Mineros luchan por la justicia en México

21 septiembre, 2010Los trabajadores tienen poco que celebrar en el bicentenario del Día de la Independencia en México, cuando el Sindicato de Mineros mexicano celebra su 15º Foro Nacional en Cananea para mostrar su apoyo a los trabajadores en huelga, que sufrieron el ataque más violento contra sus derechos una semana antes.

MEXICO: El 16 de septiembre, el Sindicato de Mineros mexicano (SNTMMSRM), afiliado a la FITIM, celebró el 15º Foro Nacional de la Sección 65 en Cananea, Sonora, con el lema "En defensa de la vida y la dignidad de los trabajadores y sus familias".

Asistieron al Foro más de mil trabajadores, junto con secciones locales y otras del Sindicato de Mineros mexicano y una delegación del USW encabezada por Jim Robinson y Manuel Armenta. También asistió el representante regional de la FITIM, Jorge Almeida, que confirmó el apoyo y la solidaridad de la FITIM con los mineros.

El Foro coincidió con las celebraciones nacionales del bicentenario de la Independencia de México y fue celebrado por el sindicato en Cananea ese día para apoyar la huelga de los mineros, que sufrieron una semana antes la última serie de ataques violentos.

A las 5.30 de la mañana, unos 600 esquiroles y la policía federal, de paisano, atacaron a los miembros del Sindicato de Mineros mexicano en la mina de cobre de Cananea, propiedad de Grupo México.

En una carta a las autoridades mexicanas, la FITIM condenó una vez más la violencia contra el Sindicato de Mineros mexicano e instó al Gobierno a reflexionar sobre lo poco que tienen que celebrar los trabajadores en México en el bicentenario del Día de la Independencia, cuando sus derechos se reprimen de esta forma.

En el Foro, Los Mineros vieron un videomensaje del mensaje de su secretario general, Napoleón Gómez Urrutia, quien se refirió a la larga lucha en la ciudad minera de Cananea, y a la voluntad del sindicato de seguir apoyando y combatiendo para llegar a una solución de los conflictos.

Después de los actos, algunos participantes se encontraron con los cristales de sus vehículos destrozados, un ejemplo más de la violencia contra los trabajadores.