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Los Juegos Olímpicos no reportan beneficios a los activistas sindicales en China

12 agosto, 2008Los avances para los trabajadores no corresponden, ni mucho menos, a las promesas hechas por China en 2001 de mejorar los derechos laborales; los activistas siguen siendo objeto de campos de trabajos forzosos, detenciones sin enjuiciamiento y ejecuciones estatales.

CHINA: En la propaganda hasta que se tomó la decisión, el 13 de julio de 2001, de conceder a Beijing el honor de acoger los Juegos Olímpicos de 2008, China prometió mejorar su pésimo historial de derechos humanos y laborales. Cuando el mundo dirige su mirada a los deportistas olímpicos reunidos en la magnífica capital de China, es importante prestar también atención a las mejoras realizadas, si es que las hay, sobre los activistas de los derechos laborales en los últimos siete años.

En junio de 2007, China promulgó nueva legislación laboral para atender las necesidades de los trabajadores por contrato. En la legislación, que entró en vigor en enero de 2008, se estipula que los contratos de trabajo han de formularse por escrito un mes antes del empleo, y que los empleadores están obligados a informar plenamente a los trabajadores acerca de sus tareas, de las condiciones de trabajo y de la compensación. También se limita la capacidad de los empleadores de recurrir a trabajadores temporeros. Si bien muchos pueden considear que esto es un paso muy positivo, queda por ver cuáles son los verdaderos efectos de la nueva legislación. En China hay muchas leyes que protegen los derechos de los trabajadores sobre el papel, pero los verdaderos beneficios legislativos para los trabajadores dependerán de la voluntad del Gobierno de aplicar esas leyes.

En mayo de 2006, Beijing amplió el uso de un sistema de detención sin enjuiciamiento denominado "Reeducación por el trabajo", aplicado desde mediados del decenio de 1950, mediante el cual se envía a personas a campos de trabajos forzosos, muchas de ellas disidentes políticos. La reeducación puede significar detención durante cuatro años, normalmente en condiciones extremas, que con frecuencia entrañan tortura. Aunque no se conoce el número real de personas sometidas a reeducación, Amnistía Internacional sospecha que hay centenares de miles.

Pese a que las cifras oficiales siguen siendo secreto de estado, los informes indican un descenso del número de ejecuciones desde 2001. Aun así, China es el líder mundial en ejecuciones estatales. Y si bien, en marzo de 2004, China enmendó su Constitución para incluir la cláusula "el Estado respeta y protege los derechos humanos", nuevos presos de conciencia han sido condenados a grandes penas de prisión, un gran número de ellos activistas de los derechos sindicales y trabajadores que tratan de formar sindicatos independientes fuera del órgano sindical oficial, la Federación Panchina de Sindicatos (ACFTU).

Entre los activistas de los derechos sindicales conocidos encarcelados desde que China prometió mejorar los derechos humanos figuran los siguientes:

Chen Yuping (encarcelado en mayo de 2008)
Antiguo trabajador de la empresa petrolera estatal Jilin, fue condenado a reeducación por el trabajo durante año y medio, por organizar un sindicato independiente. Más

Li Guohong (enviado a reeducación en noviembre de 2007)
Representante de trabajadores despedidos de la China Petroleum and Chemical Corporation (Sinopec) fue enviado a un campo de reeducación durante año y medio por tratar de lograr una compensación adecuada para 10.000 trabajadores despedidos. Más

Zhou Yuanwu (encarcelado en mayo de 2007)
Antiguo trabajador en Jingchu Brewery, que encabezó varias protestas para conseguir la pensión adeudada y el seguro de enfermedad de trabajadores despedidos, fue condenado a dos años y medio de prisión. Más

Ding Xiulan y Liu Meifeng (encarcelados en octubre de 2004)
Ding y Liu, ambos trabajadores en la Zhongheng Textile Factory, encabezaron una manifestación de protesta de los trabajadores de la factoría despedidos, para solicitar una indemnización tras la privatización de la antigua empresa estatal. Ding y Liu fueron detenidos por "agrupación para perturbar el orden social". Más

Ning Xianhua (encarcelado en septiembre de 2004)
Trabajador de la construcción, condenado a 12años de prisión por tratar de organizar un sindicato independiente. Más

Wang Sen (encarcelado en 2002)
Trabajador metalúrgico de Dazhou Steel, condenado a 10 años de prisión por organizar una manifestación pública para solicitar el pago de sueldos adeudados. Más

Yao Fuxin (encarcelado en enero de 2003)
Trabajador metalúrgico en la Liaoyang Steel Rolling Factory, condenado a siete años por ayudar a organizar manifestaciones de 17.000 trabajadores siderúrgicos despedidos para protestar contra la corrupciónen la compañía y reivindicar prestaciones adeudadas. Más

Li Wangyang (encarcelado en septiembre de 2001)
Activista de derechos de los trabajadores, condenado a 10 años por protestar por las condiciones carcelarias inhumanas sufridas durante una condena de prisión de 13 años por encabezar huelgas de trabajadores en 1989. Más

Fuente de información sobre los presos: China Labour Bulletin (Actualizado el 4 de junio de 2008)