21 octubre, 2009Más de 100.000 personas protestan en Ciudad de México contra el cierre de la compañía de electricidad y el intento de destruir al SME, un sindicato independiente en México.
MEXICO: El 15 de octubre, más de 100.000 personas marcharon por Ciudad de México para protestar contra el despido de 45.000 trabajadores por el Gobierno nacional, cuando cierre la empresa de suministro eléctrico a la ciudad. Anteriormente, el 10 de octubre, miles de agentes de la Policía Federal ocuparon las plantas de la compañía Luz y Fuerza del Centro, que suministra electricidad a Ciudad de México y varios estados vecinos.
Minutos después, el Gobierno del presidente Felipe Calderón anunció que se liquidaría la compañía y sus aproximadamente 45.000 trabajadores serían despedidos, lo que significaría la destrucción del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) y la eliminación del convenio colectivo de sus miembros y de las pensiones de 20.000 jubilados.
El SME es una de las organizaciones sindicales independientes más antiguas de México, y tiene uno de los mejores convenios colectivos del país. Ha desempeñado una importante función en la lucha contra la privatización, las reformas regresivas propuestas de la Ley del Trabajo Federal y otras políticas neoliberales.
El secretario de Trabajo, Javier Lozano, declaró en septiembre que la elecciones internas del SEM no eran válidas y que el secretario general Martín Esparza y otros dirigentes no serían reconocidos por el Gobierno. Sin dirigentes reconocidos legalmente, el sindicato no puede entablar negociaciones contractuales ni realizar otras actividades.
"Este acto de agresión a un sindicato independiente que aboga por el cambio progresivo a favor del pueblo mexicano no sorprende a la FITIM. El ataque al SME no difiere de los ataques que hemos presenciado desde 2006 contra el Sindicato de Mineros Mexicanos afiliado a la FITIM," dijo el secretario general de la FITIM, Jyrki Raina.
"Este último ataque contra el SME y contra los sindicatos independientes en México es verdaderamente chocante y la comunidad internacional no lo tolerará. Las acciones del Gobierno, incluido el uso de la policía y de militares, quebranta todas las normas internacionales y representa un serio retroceso para la vida democrática en México." agregó Raina.
Junto con la Federación Internacional de Sindicatos de Trabajadores de la Química, Energía, Minas e Industrias Diversas (ICEM), la FITIM envió una carta al presidente Calderón, el 14 de octubre, protestando por el incumplimiento de las normas internacionales del trabajo, y pidendo al presidente que "anule directamente y sin demora esta decisión y restablezca la plena autonomía e independencia del sindicato SME".
Minutos después, el Gobierno del presidente Felipe Calderón anunció que se liquidaría la compañía y sus aproximadamente 45.000 trabajadores serían despedidos, lo que significaría la destrucción del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) y la eliminación del convenio colectivo de sus miembros y de las pensiones de 20.000 jubilados.
El SME es una de las organizaciones sindicales independientes más antiguas de México, y tiene uno de los mejores convenios colectivos del país. Ha desempeñado una importante función en la lucha contra la privatización, las reformas regresivas propuestas de la Ley del Trabajo Federal y otras políticas neoliberales.
El secretario de Trabajo, Javier Lozano, declaró en septiembre que la elecciones internas del SEM no eran válidas y que el secretario general Martín Esparza y otros dirigentes no serían reconocidos por el Gobierno. Sin dirigentes reconocidos legalmente, el sindicato no puede entablar negociaciones contractuales ni realizar otras actividades.
"Este acto de agresión a un sindicato independiente que aboga por el cambio progresivo a favor del pueblo mexicano no sorprende a la FITIM. El ataque al SME no difiere de los ataques que hemos presenciado desde 2006 contra el Sindicato de Mineros Mexicanos afiliado a la FITIM," dijo el secretario general de la FITIM, Jyrki Raina.
"Este último ataque contra el SME y contra los sindicatos independientes en México es verdaderamente chocante y la comunidad internacional no lo tolerará. Las acciones del Gobierno, incluido el uso de la policía y de militares, quebranta todas las normas internacionales y representa un serio retroceso para la vida democrática en México." agregó Raina.
Junto con la Federación Internacional de Sindicatos de Trabajadores de la Química, Energía, Minas e Industrias Diversas (ICEM), la FITIM envió una carta al presidente Calderón, el 14 de octubre, protestando por el incumplimiento de las normas internacionales del trabajo, y pidendo al presidente que "anule directamente y sin demora esta decisión y restablezca la plena autonomía e independencia del sindicato SME".