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El acuerdo entre Canadá y la UE no debe minar el empleo ni los derechos laborales

6 mayo, 2010La FITIM se une a los afiliados en su llamamiento a favor de adecuadas consultas y evaluación de las repercusiones que tendría el acuerdo comercial económico amplio entre Canadá y la UE.

CANADA-EUROPA: La Federación Internacional de Trabajadores de las Industrias Metalúrgicas (FITIM) se unió a los afiliados canadienses en su exigencia de que se realicen consultas y evaluación adecuadas de las repercusiones que tendría el acuerdo comercial económico amplio entre Canadá y la UE (CETA).

La red canadiense Trade Justice Network (Red por la justicia en el comercio) está exigiendo que se publiquen los detalles de las negociaciones, ya que hay una preocupación cada vez mayor por las repercusiones del posible acuerdo comercial. La Red exige información sobre las consecuencias que tendría el acuerdo en la política pública, los servicios públicos, la economía, la pobreza, la cultura de igualdad entre los sexos, los derechos humanos y el medio ambiente: una exigencia que tiene el apoyo de la FITIM.

Con el apoyo de los afiliados canadienses de la FITIM -Canadian Auto Workers (CAW) y United Steelworkers (USW)- una declaración pública de la sociedad civil canadiense sobre el acuerdo comercial exige:
  • plena transparencia
  • una detallada evaluación de las repercusiones
  • la protección de los servicios públicos
  • el fortalecimiento de la política social
  • el derecho de contratación pública
  • el derecho a regular
  • la protección de la soberanía cultural
  • ninguna disposición de derechos de los inversionistas como las de EE.UU. y México en el TLC-AN
  • plena protección de los derechos laborales
  • respeto y protección de los derechos de los pueblos indígenas
  • sustentabilidad ecológica y acciones contra el cambio climático

El texto integral de la declaración está disponible aquí .

El CAW informa que "el acuerdo propuesto entre Canadá y la UE, como cualquier otro acuerdo de libre comercio, probablemente exacerbará los actuales flujos comerciales y ahondará los desequilibrios comerciales. Canadá mantiene un enorme déficit comercial con nuestros primos europeos. En 2008 importamos mercancías por CAD 17.000 millones más que las que exportamos a la UE. Eso se debe en gran parte a un continuo déficit comercial de artículos manufacturados, en particular de automóviles. En efecto, ¡por cada dólar que exportamos en automóviles a la UE importamos de ella CAD 15,30! Canadá tampoco anda mucho mejor en los servicios: registra un déficit comercial de CAD 4.000 millones (cifras de 2007)."

Los sindicatos y los interlocutores de la sociedad civil de Canadá están preocupados por el acuerdo comercial, ya que su país ha perdido en años recientes más de 550.000 puestos de trabajo bien remunerados en el sector de manufactura y procesamiento: una tendencia que se ha agravado por la continua degradación de la calidad del empleo en servicios en todo el país, tanto en el sector público como en el privado.

"La intervención estratégica económica orientada al futuro, sin más tratos comerciales cortos de miras, contribuirá a fomentar un enfoque más integrado del gobierno en la tarea de desarrollar industrias dinámicas, competitivas y florecientes", dice el CAW.