9 abril, 2007
Trabajadores petroleros en Chad hace dos semanas pusieron fin a una huelga en los ricos yacimientos Doba, pero advirtieron que podrían ocurrir otros paros. Unos 500 trabajadores están disgustados por motivos de seguridad en el puesto y seguridad física laboral, además de demoras en cumplir demandas de sueldo. ExxonMobil, basada en Estados Unidos, opera un enorme número de sitios de producción en los yacimientos Doba, además del controversial oleoducto de 1063 kilómetros a Kribi, el puerto en el Atlántico de la vecina Camerún.
Los trabajadores petroleros, encabezados por el centro laboral de Chad, UST, realizó paros de tres días dos veces en julio pasado sobre disparidades de sueldos. En ese momento, los trabajadores ganaban un tercio de lo que ganan trabajadores petroleros en Camerún. Aunque las huelgas del 2006 lograron aminorar esa desigualdad , queda todavía una diferencia enorme entre trabajadores del petróleo en los dos países.
ExxonMobil opera el oleoducto Chad-Camerún con Patronas de Malasia y Chevron de Estados Unidos como socios. Los ricos yacimientos Doba en el sur de Chad producen ahora 150.mil barriles por día, y se anticipa que rendirán 200 mil en el futuro cercano. Doba tiene reservas estimadas en 900 mil millones de barriles en los próximos 25 años.
El desarrollo de los yacimientos Doba, junto con el oleoducto a Kribi, que funciona desde hace tres años, se ha visto demorado por controversia en el Banco Mundial. Eso incluyó una suspensión por un año de fondos del Banco para el proyecto. La construcción del oleoducto. La construcción del oleoducto también plagado por violaciones laborales y de derechos humanos. Muchos trabajadores a contrata de Chad-Cameroon Constructors, el consorcio creado por las empresas petroleras, no recibieron su sueldo. Además, una tasa de sida/VIH a lo largo del oleoducto es tres veces mayor que los promedios nacionales de Chad y Camerún, cifras que reflejan la poca responsabilidad social de las empresas asociadas.