24 octubre, 2011
Hoy, a primera hora, sindicalistas de la CGT-Filpac y de CFE-CGC subieron a cinco autobuses que partieron de Alizay en el norte de Francia, rumbo a París, para continuar su lucha para mantener en funcionamiento una planta papelera de M-real. En París, los papeleros de Alizay, en la región de Haute-Normandie, realizarán una manifestación de protesta en el Ministerio de Agricultura, donde está comenzando la mediación entre las autoridades francesas, la empresa finlandesa, y dos potenciales compradores.
El 19 de octubre, día en que M-real dio a conocer el cierre de la planta de Alizay, productora de papel no estucado. Después de conocerse el cierre de la fábrica, unos 330 trabajadores comenzaron una huelga y bloqueo de la planta. M-real, que es 40% propiedad de Metsäliitto, empresa finlandesa de silvicultura, había suspendido las conversaciones con Advance Agro Ltd, que se conoce como Double A Paper, con casa matriz en Tailandia, y con Fin’active SAS, empresa de inversión de capital que tenía programado adquirir la planta papelera, que viene produciendo papel desde hace 48 años.
Thierry Philippot
El 20 de octubre, muchos trabajadores papeleros salieron de la puerta delantera de la fábrica, dirigiéndose a la autopista A13 que va de Normandía a París, donde dejaron pasar a los automovilistas con “peaje gratis”, entregándoles un volante que explicaba los problemas que enfrentan.
El 4 de mayo, M-real informó que pensaba vender las plantas de papel para imprimir situadas en Alizay y en Gohrsmühle, Alemania, como parte de un gran programa de reestructuración para dejar el sector del papel fino, centrando la atención en cartón para embalaje.
Thierry Philippot, representante de la CGT-Filpac en esa planta dijo al respecto: -Nos hemos preparado para la posibilidad del cierre, pero todavía no estamos dispuestos a aceptarlo.-
Trabajadores papeleros bloquean la planta Alizay de M-Real
El 30 de septiembre, Philippot, junto con otro representante de la CGT, Jean-Yves Lemahieu, y Eric Hogger, representante de la CFE-CGC, viajaron para Helsinki con el fin de reunirse con el Director General de M-real, Mikko Helander con la esperanza de poder concretar algún acuerdo.
M-real había exigido que se cumplieran dos condiciones para vender la planta: que se mantenga durante 24 meses la nómina actual de empleados, y que los ingresos de las ventas de la planta sean reinvertidos en las operaciones, que producen 310.000 toneladas al año. Aunque tanto Advance Agro como Fin’active parecían aceptar estos términos, el acuerdo con Advance Agro, la empresa que más se favorecía, fracasó cuando la empresa tailandesa exigió otras condiciones.
La mediación de hoy es con Advance Agro, empresa que cuenta con dos plantas de pulpa y tres fábricas de papel en el país donde tiene su sede. Más adelante, esta semana, se realizará la mediación con Fin’active, empresa de inversiones que se especializa en activo con dificultades económicas. Las conversaciones serán encabezadas por el Ministro de Agricultura de Francia, Bruno Le Maire, miembro del partido UPM, y parlamentario del departamento de Eure, donde está situada la planta de Alizay.