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La huelga de los petroleros colombianos se intensifica

14 agosto, 2005Comunicado de prensa 27/2004

La ICEM ha criticado duramente al gobierno de Colombia hoy por sus violentos intentos de romper la huelga en Ecopetrol, la empresa petrolera nacional, que ha durado casi un mes. Manifestando su apoyo a la Unión Sindical Obrera de la Industria del Petróleo (USO), el Secretario General de la ICEM, Fred Higos, declaró en una carta al Presidente Álvaro Uribe que la utilización por parte del gobierno colombiano de "personal militar armado dentro y en los alrededores de las instalaciones petroleras de Ecopetrol ha exacerbado el conflicto," dificultando aún más su resolución. 

USO march at Barrancabermeja refinery

Hasta la fecha, unos 100 miembros y dirigentes de USO han sido despedidos por participar en la huelga. Según informes, se han producido arrestos y amenazas de muerte y otras formas de acoso en contra de sindicalistas y partidarios de USO. Al criticar al gobierno por crear un clima de hostilidad hacia el sindicato y sus miembros, la mayor federación sindical del petróleo y la energía del mundo instó al Presidente Uribe a que cambiara de actitud y "estableciera una base común de negociación con USO con el fin de encontrar una solución justa y equitativa a este conflicto".

El gobierno del Sr. Uribe declaró ilegal la huelga que estalló el 22 de abril, calificando la actividad de refinado del petróleo como "servicio esencial" para Colombia. En una carta con fecha del 30 de abril al Presidente Uribe, Higgs y la ICEM afirmaron que el gobierno se equivocaba: generalmente la OIT en sus fallos para casos similares ha catalogado al refinado de petróleo como una actividad que no constituye un "servicio esencial".

La huelga de USO en Ecopetrol se origina en su protesta en contra de la decisión del gobierno de reestructurar las reservas y la producción del petróleo otorgando a varias multinacionales del petróleo nuevos contratos concediéndoles términos más favorables. El sindicato sostiene que tales políticas equivalen al robo de los recursos naturales del país y constituye el primer paso para la venta definitiva de Ecopetrol. USO desea también que a través de la huelga se pueda negociar un nuevo convenio colectivo salarial, tema que se niegan a tratar el gobierno y la empresa.

La ICEM, que representa a 20 millones de miembros, está e acuerdo con USO que la huelga actual en Ecopetrol es una acción fundamental para la Colombia moderna y solicita a los sindicatos en todo el mundo, en especial, los del sector del petróleo y la energía, que sigan de cerca el conflicto y les presten su apoyo solidario.