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Encarcelan injustamente a dirigentes sindicales de Georgia

26 septiembre, 2011

A fines de esta semana, saldrán en libertad tres dirigentes sindicales de Euroasian Steels, en Kutaisi, Georgia, después de que fueran víctimas de injusto encarcelamiento por diez días, bajo orden de detención administrativa. Emilo Gumberidze, Irakli Iobidze, y Malkhaz Gogiava fueron detenidos hace ocho días en una plaza de mercado de Kutaisi, tres días después de que la policía de Georgia pusiera fin brutal a una huelga que realizaba en esa ciudad el Sindicato de Trabajadores Metalúrgicos, Mineros y del Sector de la Química de Georgia, organización afiliada a la ICEM. 

Se acusó a los tres sindicalistas de poseer/consumir drogas, y los sometieron a pruebas para narcóticos. Los tres resultaron claramente inocentes. Sin embargo, porque manifestaron lo ridículo que era la acusación, se les acusó de faltar el respeto a la policía. El 19 de septiembre, la Corte de la ciudad de Kutaisi condenó a Gumberidze, Iobidze, y Gogiava a diez días de cárcel.

Esa condena fue una excusa para encerrar a sindicalistas que dirigían un movimiento legítimo de trabajadores que protestaban porque su lugar de trabajo, a pesar de existir desde hace dos años, no cuenta con ninguna estructura salarial, ningún plan de salud y seguridad, no cumple con las normas internacionales del trabajo, no paga sobretiempo, pero que exige trabajo obligatorio y sin límite por un sueldo miserable. Cuando los trabajadores ejercieron su derecho internacionalmente reconocido de declarar la huelga por tales condiciones, se respondió con una campaña propia de un estado policial. En las últimas semanas, han sido despedidos veintinueve trabajadores siderúrgicos de la empresa Euroasian, que se conoce localmente como Hercules, por haber informado sobre las terribles y despreciables condiciones de trabajo.

Euroasian Steels es una empresa india-georgiana, 87,5% propiedad de Euroasian Ventures de Manaksia Ltd, y 12,5% de Paata Chkhenkeli, ingeniero de Georgia que tiene estrechos vínculos con el actual gobierno, que tiene mucho interés en el comercio, pero que carece de estatutos de regulación o de trabajo. Hercules es una mini planta de laminación de refuerzos y palanquillas de acero de chatarra de hierro fundido, para luego vender las barras de acero al sector de la construcción en Asia Central.

La policía de Georgia pusiera fin brutal a la huelga
Photo Credit: RIA Novosti

La empresa emplea a 400 trabajadores, entre éstos 130 personas con nacionalidad india, a quienes se separa de los trabajadores georgianos, tratándolos como sirvientes con contrato obligatorio. La administración retiene sus pasaportes, los sueldos son enviados a la India, y se les da un pequeño estipendio para vivir. Por otra parte, además del conflicto del Sindicato de Trabajadores Metalúrgicos, Mineros y del Sector de la Química de Georgia, los trabajadores de la India declararon un paro de dos horas para protestar por las pésimas condiciones de trabajo. Ha sido la segunda huelga que se ha conocido en los últimos meses.

La situación que existe en Euroasian Steels en Kutaisi ha llamado mucha atención a nivel mundial, lo cual no puede favorecer el ambiente comercial de Georgia ni la imagen social de ese país. El 19 de septiembre, la ICEM envió una severa carta de protesta a Mikheil Saakasvhili, Presidente de Georgia, y a Nika Gilauri, Primer Ministro, sobre los notorios abusos cometidos la semana anterior contra los derechos humanos por las fuerzas policiales y las autoridades del gobierno. (Se puede ver aquí, en inglés, un comunicado de prensa de la ICEM sobre este tema.) 

Con relación a la represión más reciente, LabourStart ha lanzado una nueva campaña sobre Georgia, que se puede consultar aquí.

Por otra parte, la semana pasada, la Confederación Sindical de Georgia (GTUC), varias ONG, y otros grupos de la sociedad civil realizaron protestas ante los ministerios del gobierno en Tbilisi, y ante las oficinas provinciales en Kutaisi. Dichas protestas continuarán esta semana, culminando en una concentración masiva ante el parlamento de Georgia, el 1° de octubre.