6 junio, 2011
Ya llevan 13 días de paro de actividades unos 10.000 trabajadores que laboran en El Teniente en compañías subcontratadas de Codelco, empresa del estado de Chile que se dedica a la comercialización de la minería del cobre y del molibdeno. La huelga es legítima, aunque no está cubierta por la legislación laboral del país. Los empleados subcontratados exigen que Codelco entable un diálogo directo con sus sindicatos.
Esta huelga comenzó el 25 de mayo contra Codelco y 20 empresas subcontratistas, y se realiza en El Teniente, una de cinco divisiones de Codelco, situada a 90 kilómetros al sur de Santiago, y que es la mayor mina subterránea de cobre del mundo. Los trabajadores subcontratados de las empresas de limpieza, restaurantería, aprovisionamiento y otras, exigen que una de estas empresas principales asista a la mesa de negociaciones con el fin de abordar el problema de programas de primas especiales que han fallado, horas de trabajo sin pagar, inseguridad en los puestos de trabajo, y otros reclamos. También exigen que no se tomen represalias por las huelgas que se han declarado, indicio claro del temor, la precariedad laboral y la discriminación antisindical que existe en El Teniente.
Codelco se atiene al Acuerdo Marco de 2007, afirmando que no es obligación de esa empresa atender a las quejas de trabajadores subcontratados. Diego Hernández, Director General de Codelco, señaló que la responsabilidad legal de la empresa no va más allá del cumplimiento de normas de salud y seguridad, y que corresponde a las empresas subcontratistas velar por el cumplimiento de normas de seguridad social. Los sindicatos que representan a los trabajadores subcontratados quieren que se revise el Acuerdo Marco.
Huelga de trabajadores contratistas en El Teniente
Las movilizaciones han logrado el apoyo de funcionarios del estado y dirigentes políticos de la región, y la ICEM felicita a los trabajadores subcontratados de El Teniente por haber tomado medidas directas, tratando de este modo de hacer que la empresa principal responda a sus reivindicaciones.
El 30 de mayo, las tres seccionales de la Federación de Trabajadores del Cobre (FTC) en El Teniente, que representan a 2.300 trabajadores de Codelco contratados en forma directa, publicaron una declaración que decía, en parte, que la Federación de Trabajadores del Cobre “ha mantenido siempre una postura solidaria con las legítimas aspiraciones de los trabajadores contratistas. La FTC ha sido un actor clave para abrir las conversaciones entre las organizaciones sindicales representantes de los trabajadores contratistas, las propias empresas contratistas y Codelco como empresa mandante, con el fin de buscar acuerdos positivos para las partes”.
“La FTC expresa su solidaridad con los trabajadores contratistas y con sus organizaciones sindicales representativas, y dejamos claro que no apoyamos la manipulación e instrumentalización de un movimiento legítimo para favorecer intereses ajenos a los trabajadores”.
El conflicto fue pacífico durante los primeros 9 días de la huelga, pero el viernes 3 de junio se alteró la calma cuando los trabajadores subcontratados bloquearon los caminos que van hacia el complejo minero. A consecuencia del bloqueo, se tuvo que devolver un autobús que llevaba a los trabajadores de planta.
En el primer trimestre del año, gracias a los altos precios del cobre y del molibdeno, las ganancias antes de los impuestos de Codelco, la mayor empresa productora de cobre del mundo, aumentaron vertiginosamente, alcanzando US$2.31 billones, lo cual constituye un aumento del 87% en comparación con el mismo período en el año 2010, y se debe en parte a que la empresa estatal señalada vendió su participación del 40% en Edelnor, empresa productora de energía eléctrica.
Por otra parte, la Federación de Sindicatos de Supervisores y Profesionales Rol A Codelco (FESUC), la federación de personal administrativo y profesional de Codelco, alegó que los directores administrativos estaban transformando la empresa, con el único propósito de permitir su privatización. Esto está sucediendo en momentos en que se está despidiendo a los supervisores de algunas divisiones sin ofrecerles la opción de traslado.
Ricardo Calderón, Presidente de FESUC, dijo que los despidos, empleo precario y la tercerización son precursores de la privatización, en tanto otro dirigente de la FESUC hizo un llamado al Sr. Hernández, Director General, para que declare públicamente que no se va a vender la empresa a inversionistas privados.