29 agosto, 2018La Oilfields Workers’ Trade Union (OWTU) se opone a los planes del Gobierno de Trinidad y Tobago de cerrar la refinería propiedad de la empresa petrolera nacional Petrotrin, con la pérdida de al menos 2.500 puestos de trabajo.
En vísperas del 56º aniversario de la independencia de Gran Bretaña, el Gobierno de Trinidad y Tobago anunció ayer el cierre de la única refinería del país, con la pérdida de 2.500 empleos permanentes en la empresa petrolera estatal Petrotrin. El anuncio forma parte de un plan de reestructuración de la empresa, muy endeudada. Los 3.500 trabajadores serán enviados a casa, pero unos 1.000 podrán volver a solicitar sus empleos.
La dirección de la empresa se reunió ayer con la OWTU, afiliada a la IndustriALL Global Union. Aunque el Gobierno y la empresa niegan los planes de privatización, el presidente general, Ancel Roget, dijo:
“Así que van a cerrar la refinería. ¿Y qué van a hacer con ella después? Sospechamos que después de enviar a los trabajadores a casa, hacer una operación de terminal, importar combustible a alto coste, y utilizar las divisas para importar ese combustible, procederán a una venta de liquidación. Surgirán los verdaderos propietarios….
¡Esto significa volver a la plantación! Volver a ser productores de materias primas. Produciremos crudo, pero en lugar de refinarlo nosotros, lo venderemos. Y otros obtendrán el valor añadido, al revendérnoslo."
La OWTU viene expresando preocupaciones desde hace mucho sobre la gestión de la empresa en dificultades, y desde 2008 ha pedido que se reestructurase de manera que la población se beneficie. Petrotrin es la mayor empresa estatal de Trinidad y Tobago, y es un pilar de la economía. Sin embargo, los años de mala gestión han llevado a una dramática caída de la producción y a una pérdida de miles de millones de dólares en valor.
Entre las preocupaciones expuestas por el sindicato cabe citar un número alarmante de muertes y otros problemas de seguridad, que no se han resuelto, una falta de inversión en una infraestructura que envejece, la adjudicación corrupta de contratos y el patrocinio político. Los megaproyectos han culminado con excesivos sobrecostes, no se han terminado a tiempo, y no han reportado beneficios.
El sindicato se indignó por una declaración del ministro de energía, quien afirmó que la factura salarial representa el 50 por ciento del coste de la empresa, muy endeudada. El sindicato ha demostrado que los salarios suponen sólo el 11 por ciento, y que la razón del endeudamiento es un legado de mala gestión.
“Trinidad y Tobago celebrará 56 años de independencia de Gran Bretaña el 31 de agosto", dijo el portavoz del sindicato, Ozzie Warwick.
Pero, ¿cómo puede haber independencia económica si nosotros, el pueblo, no ocupamos los puestos de mando de la economía”
El secretario general de la Industrial, Valter Sanches, pidió el Gobierno de Trinidad y Tobago que incluya e la OWTU en las negociaciones sobre la reestructuración de la empresa, diciendo:
Con esta decisión no sólo se destruirá el medio de vida y el bienestar de los trabajadores y sus comunidades, sino que se retrotraerá al país a la época colonial.
La cesión de soberanía—sobre la explotación de recursos naturales esenciales, y la generación de productos de valor añadido—a intereses privados, iría en contra de las aspiraciones de la población y de los trabajadores de Trinidad y Tobago para consolidar su democracia y lograr el desarrollo sostenible en sus propios términos.
La IndustriALL pide a sus afiliados que se solidaricen con la OWTU en su lucha por salvar los empleos de sus miembros, y los activos de la población de Trinidad y Tobago.