16 junio, 2022Casi cinco años después de que perdieran sus empleos por afiliarse a un sindicato, un tribunal turco falló a favor de los 80 trabajadores despedidos en 2017 y declaró que Birleşik Metal İş es el sindicato representativo en el lugar de trabajo.
En 2017, el sindicato Birleşik Metal-İş, afiliado a IndustriALL, intentó afiliar a los 420 trabajadores de la planta siderúrgica de Posco Assan en Kocaeli, Turquía, después de que expresaran su profunda insatisfacción con los salarios y las condiciones de trabajo. Cuando la dirección se enteró de la iniciativa de sindicalización, organizó reuniones individuales con los trabajadores para intimidarlos y convencerlos de abandonar la organización. Los que se negaron a renunciar al sindicato fueron despedidos.
En 2017, la empresa también cambió el registro de su oficina a una fábrica metalúrgica para evitar que Birleşik Metal-İş obtuviera la mayoría requerida en la planta. El derecho sindical turco exige que un sindicato afilie al menos al 50 por ciento +1 del personal de la empresa para ser su representante legal.
Después de cinco años, el Tribunal de Casación de Turquía, el de mayor jerarquía del país, dictaminó a principios de este mes que el sindicato era efectivamente mayoritario en el lugar de trabajo y que Posco debía reconocerlo como un interlocutor social en la negociación colectiva.
El tribunal había dictaminado anteriormente que, como los despidos de 2017 se debieron a la afiliación al sindicato, estos debían anularse y se debía reincorporar a los 80 trabajadores. A Posco se le ordenó pagar un total de 16 meses de salario, además de la indemnización por despido.
Sin embargo, Posco se negó a reincorporar a los trabajadores y, en su lugar, tuvo que pagar una indemnización adicional.
Birleşik Metal-İş ha estado apelando a los accionistas de POSCO Steel desde 2017, y el banco sueco Nordea decidió retirar sus inversiones de la empresa y añadirla a su lista de exclusión por “violación de las normas establecidas”.
El secretario general adjunto de IndustriALL, Kemal Özkan, afirmó:
“Este caso muestra claramente lo restringido que es el derecho fundamental a la libertad sindical para los trabajadores turcos. Es inaceptable tener que esperar cinco años para obtener el reconocimiento sindical, en detrimento de los empleos y los medios de vida de los trabajadores. POSCO y su empresa asociada aprovecharon el proceso legislativo para impedir que los trabajadores gozaran de la protección de un convenio colectivo.
IndustriALL insta a POSCO a respetar el veredicto final del tribunal y a entablar un diálogo con Birleşik Metal-İş para llevar a cabo un proceso de negociación colectiva de buena fe”.
Posco es la quinta empresa siderúrgica más grande del mundo. No hay representación sindical en su país de origen, Corea, debido a la postura antisindical de la empresa.