28 agosto, 2014En Ontario, Canadá, cuando los llamaron a votación, supervisada por el Ministerio del Trabajo, sobre la más reciente oferta que había presentado la empresa, los trabajadores de Bombardier en Thunder Bay demostraron incuestionablemente su empeño de luchar por puestos de trabajo de buena calidad y un futuro seguro.
Los miembros de Unifor Local 1075 se declararon en huelga el 14 de julio de 2014, respondiendo a las presiones y exigencias de Bombardier que pedía grandes concesiones a los trabajadores. La oferta patronal más reciente fue sometida a votación, a petición de la empresa, y de acuerdo con la legislación provincial que señala que se debe ofrecer dicha opción en cada ronda de negociación. El 80% de los trabajadores votó en contra de la oferta.
Al comentar sobre los resultados de esta votación, Jerry Dias, Presidente Nacional de Unifor, señaló al respecto: "Estos trabajadores han mostrado estar extraordinariamente decididos y firmes en su lucha por mantener buenos puestos de trabajo para hoy y para las generaciones futuras."
"Estos resultados están diciendo claramente a Bombardier que los miembros de este sindicato apoyan a su equipo de negociación, que reiteradamente ha dicho a la empresa que el sindicato no podrá aceptar las concesiones exigidas", terminó diciendo Díaz.
Si se hubiera aceptado la propuesta patronal, habría significado grandes recortes en prestaciones para los trabajadores actuales y los jubilados, además de ofrecer un aumento salarial miserable de menos del uno por ciento en tres años; también se habría negado el plan actualmente establecido de beneficios de pensiones de jubilación para trabajadores contratados después del 31 de mayo de 2014. El personal contratado en 2011 no habría recibido beneficios de jubilación, y habría recibido un monto único de 350 CAD (245 EUR). Más de la mitad de los trabajadores se habría visto afectada por esta concesión.
Finalmente, Dominic Pasqualino, Presidente de Unifor Local 1075, dijo que si la empresa quisiera economizar dinero, tendría que buscar mejores maneras para hacerlo. "Si trabajara en forma conjunta con el sindicato, la empresa podría eliminar muchas prácticas antieconómicas, resultando en enormes ahorros que beneficiarían a la compañía; de esta manera, podría continuar financiando nuestras modestas pensiones de jubilación", terminó diciendo Pasqualino.