22 julio, 2016Los trabajadores y trabajadoras de LG Electronics India Pvt. Ltd volvieron al trabajo después de una protesta de diez días contra la decisión unilateral de la administración de la empresa de trasladar a 12 trabajadores/as, entre ellos varios dirigentes sindicales, a diferentes partes de la India. Durante esta crisis, SMEFI, organización afiliada a IndustriALL Global Union, ha brindado su valioso apoyo a la lucha de la fuerza de trabajo de LG.
Por la tarde del 20 de julio, los trabajadores/as de LG India acordaron con la administración de la empresa, según se ha informado, que los trabajadores/as indicados serán trasladados a plantas cercanas en vez de lugares lejanos como se había ordenado anteriormente. No se aplicarán represalias contra los trabajadores/as que participaron en la protesta, y la fuerza laboral de la empresa, en su totalidad, volverá a su trabajo.
LG Electronics India Pvt. Ltd emplea a unos 2.350 trabajadores/as, constituidos por aproximadamente 850 trabajadores/as permanentes y 1.500 trabajadores/as a contrata. En enero de 2016, el personal de LG tomó por primera vez la iniciativa de crear un sindicato, solicitando inscripción del Sindicato de Empleados de LG Electronics ante el secretario de registro sindical.
El 9 de julio, se negó la entrada a la planta a 11 trabajadores y trabajadoras, incluidos los dirigentes del propuesto sindicato. La administración de la empresa les quitó sus tarjetas de identificación, y en seguida les informó que serían trasladados a diferentes plantas en regiones lejanas de la India, incluyendo Jammu Kashmir, Jharkhand y Bihar, ordenándoles que debían presentarse para trabajar en esos lugares. Dos días después, otra persona más recibió también una orden de traslado.
Para los 12 trabajadores/as involucrados, fue una sorpresa esta maniobra de la empresa, y no estaban en condiciones de poder trasladarse de inmediato a nuevos lugares de empleo, junto con sus niños y familiares. El 11 de julio, como acto de solidaridad, toda la plantilla permanente, incluyendo a unas 60 mujeres, realizó una protesta en la fábrica, exigiendo que se anulara la decisión unilateral de trasladar a los trabajadores/as. También exigieron que se reconociera al sindicato, jornadas de trabajo de ocho horas de cumplimiento vinculante, aumentos salariales y la regularización de los trabajadores/as a contrata. Unos 250 trabajadores y trabajadoras permanentes realizaron una manifestación frente a las puertas principales de la empresa, mientras 650 trabajadores y trabajadoras permanentes protestaban en el interior de la fábrica.
Por otro lado, el 19 de julio, la policía detuvo a tres trabajadores acusados de supuestamente intentar impedir que trabajadores a contrata entraran en la fábrica. Según informaron los mismos trabajadores, la policía no les detuvo de manera formal, y con el fin de presionar a los trabajadores/as que protestaban, la policía mantuvo a los mencionados trabajadores en la comisaría de Surajpur, negándoles la libertad. Debido a las detenciones, y el temor de ser atacados por matones contratados por la empresa, el 20 de julio los trabajadores/as llegaron a un acuerdo con la administración patronal y pusieron fin a la protesta. Si bien no se han cumplido sus reivindicaciones clave, la protesta demostró públicamente la firme unidad de todos los trabajadores/as permanentes en la mencionada empresa.
La mayoría de los trabajadores/as permanentes lleva entre seis y diez años trabajando en la fábrica de LG. Sin embargo, a pesar de esa antigüedad, perciben un bajo salario de alrededor de Rs 18.000 (US$ 268) al mes por una jornada de ocho horas, con Rs 24.000 (US$ 357) mensuales por horas extraordinarias. A los trabajadores/as a contrata se paga menos todavía. En realidad, cada trabajador/a realiza unas cuatro horas de sobretiempo casi todos los días, por lo que su jornada de trabajo habitual suele ser de 12 horas al día. Con el fin de mejorar las condiciones de trabajo, los trabajadores/as establecieron un sindicato y enviaron una carta de reivindicaciones a la administración de la empresa.
En vez de dialogar con los trabajadores, la administración de LG aplicó injustas prácticas laborales contra los miembros del sindicato, con medidas de represión antisindical. La administración promovió a miembros activos del sindicato a la categoría de personal administrativo. Posteriormente, el secretario de registro sindical negó el registro legal del sindicato, citando el ascenso de dirigentes sindicales, señalando que trabajadores/as que han subido de categoría ya no pueden ser miembros del sindicato, y que por lo tanto el sindicato no puede ser registrado.
Los trabajadores y trabajadoras de LG continuarán con el proceso legal para lograr el registro del sindicato y seguirán adelante con sus reivindicaciones.
Por su parte, Kan Matsusaki, Director del Sector de TIC, Electricidad y Electrónica de IndustriALL, afirmó lo siguiente: “Se trata de un típico caso de represión antisindical en la India. La administración de LG ha de saber que con trucos baratos como los que ha exhibido va a dañar la imagen de la empresa. Por otra parte, la compañía ha declarado en su política de RSC que protege los derechos humanos/laborales fundamentales de los empleados, señalando también que desarrolla “relaciones entre la fuerza de trabajo y la administración en que todos salen ganando”. Junto con SMEFI, nos solidarizamos con la lucha de los trabajadores y trabajadoras de LG en la India y seguiremos apoyándoles”.