11 abril, 2018El Sindicato General de Empleados del Sector Eléctrico de Irak (GTUESE), organización afiliada a IndustriALL, está decidido a enfrentar el problema del trabajo temporal en el sector de la electricidad de Irak. Ha organizado una serie de protestas frente a los ministerios del gobierno, además se ha reunido con altos funcionarios gubernamentales para iniciar negociaciones.
En los últimos años, el gobierno iraquí ha aumentado el uso de mano de obra temporal y a destajo; en el sector eléctrico, actualmente hay más de 30.000 trabajadores/as temporales y a destajo. Realizan las mismas tareas que el personal permanente, pero en algunos casos ganan la mitad de lo que ganan los empleados de planta, y a veces se retrasa el pago de sus sueldos. Además, no les permiten participar en los programas de seguridad social ni de pensiones de jubilación.
En 2009, los trabajadores/as temporales en el Ministerio de Electricidad comenzaron una lucha para exigir empleo permanente y que les concedieran participación en los programas de seguridad social y el plan de pensiones. Durante varios años, el estado se comprometió a actuar al respecto, pero estas promesas nunca se aplicaron en la práctica.
Los sindicatos de Irak lucharon contra la legislación, impuesta en 2010, que prohibía la formación de sindicatos en el sector de la electricidad, y en 2017 triunfó su campaña para lograr que Irak ratificara el Convenio 87 de la OIT sobre libertad sindical y protección del derecho de sindicación.
En abril de 2017, los trabajadores/as temporales se organizaron en un sindicato con 3.000 miembros afiliados. El sindicato se unió a la Federación General de Sindicatos de Iraq, y en diciembre de 2017 se fusionó con el Sindicato General de Trabajadores y Técnicos de la Electricidad para crear el GTUESE.
Durante cinco meses no se ha pagado los sueldos a muchos trabajadores/as temporales. El 24 de febrero de 2018, GTUESE se reunió con los funcionarios del Ministerio de Electricidad para comunicar las reivindicaciones de la fuerza de trabajo. El 15 de marzo, los trabajadores/as, encabezados por GTUESE, organizaron manifestaciones en 10 gobernaciones diferentes, incluida Bagdad. El 28 de marzo, GTUESE organizó otras manifestaciones más.
En represalia, al día siguiente, el Ministerio despidió a 100 trabajadores/as temporales, afirmando que se habían ausentado del trabajo durante la manifestación. Muchos tenían más de diez años de servicio. Estos despidos constituyen una violación de la legislación laboral iraquí, de su contrato de empleo, de la Constitución de Irak y del Convenio 87 de la OIT.
El 2 de abril, los trabajadores y trabajadoras comenzaron tomas de duración indefinida en las centrales eléctricas de todo el país.
Continúan las negociaciones con el gobierno, dirigidas por Hashmeya Alsaadawe, Presidenta de la Federación de Sindicatos de Basora y miembro del Comité Ejecutivo de IndustriALL, y por Tahseen Elsaadie, Presidente de GTUESE. El sindicato exige:
- Contratos de empleo permanentes e inclusión en el programa de seguridad social y de pensiones
- Reincorporación de los trabajadores y trabajadoras que fueron despedidos el 29 de marzo
- Implementación del Decreto del Consejo de Ministros que aprobó el salario mínimo de 350.000 dinares iraquíes (US$ 300).
Valter Sanches, Secretario General de IndustriALL, escribió al Primer Ministro de Irak y al Ministro de Electricidad, pidiendo la reincorporación de los trabajadores/as despedidos, y que se otorguen contratos permanentes a los trabajadores/as temporales. En la carta señaló lo siguiente:
“IndustriALL Global Union está profundamente preocupado por las graves violaciones de los derechos sindicales en el Ministerio de Electricidad. Muchos trabajadores y trabajadoras temporales y a destajo no han recibido sus salarios desde hace más de cinco meses. Todavía no se ha cumplido con sus exigencias de tener contratos permanentes y de participar en los programas de seguridad social y pensiones. Algunos empleados llevan más de diez años trabajando en el Ministerio de Electricidad”.