24 julio, 2017En una importante victoria contra el trabajo precario, el afiliado a la IndustriALL el Sindicato Nacional de Trabajadores Metalúrgicos de Sudáfrica (NUMSA), ganó una causa contra los proveedores de servicios de trabajo temporal, conocidos también como intermediarios laborales, en la Corte de Apelaciones del Trabajo, el 10 de julio. El avance se produjo después de años de continuas campañas por los sindicatos sudafricanos para detener la explotación intensificada de los trabajadores por agencias, como los intermediarios laborales.
El NUMSA llevó el caso al tribunal por sus miembros colocados por un intermediario laboral, Assign Services, que estaban trabajando para Krost Shelving and Racking, empresa que fabrica productos de almacenamiento, como estanterías de acero, anaqueles y armarios. De los 90 trabajadores de Krost 72 estaban organizados por el NUMSA, unos temporeros y otros permanentes.
El tribunal dictaminó que un contrato de un agente laboral para un empleo temporal sólo podía durar tres meses. Después, el trabajador tenía que ser confirmado permanente por el empleador para el que trabajaba.
La victoria en el tribunal fue acogida con satisfacción por más de un millón de trabajadores empleados en condiciones de intermediación laboral en la mayoría de los sectores de la economía, incluidos los organizados por el NUMSA.
Los sindicatos han hecho campañas incesantemente para poner fin a esta precariedad y a la subcontratación del trabajo. Adujeron que los intermediarios laborales no crean puestos de trabajo sino que los devalúan mediante menores salarios y prestaciones para aumentar los beneficios de los empleadores. Esos empleos no dan derecho a prestaciones como asistencia médica o pensiones.
También es sabido que los empleadores utilizan a los agentes laborales para despedir a los trabajadores. En esos casos, los trabajadores pasan a un intermediario laboral que luego pone fin a sus contratos.
Los intermediarios también ignoraron las demandas del sindicato de igualdad de remuneración por un trabajo de igual valor, y atacaron al sindicato para acabar con los derechos de negociación colectiva. Entre sus tácticas cabe citar el empleo de esquiroles para romper huelgas, además de reducir la capacidad de los trabajadores para obtener calificaciones cuando pasaban de un lugar de trabajo a otro con contratos de corta duración.
La larga campaña del NUMSA contra los intermediarios laborales se centró en la necesidad de la igualdad de trato de los trabajadores. El sindicato dice:
“El caso confirmó además que una vez que son permanentes, a los trabajadores por contrato se les tiene que tratar igual que a los empleados permanentes, y deben tener los mismos derechos y prestaciones.”
Fabian Nkomo, secretario regional de la IndustriALL para el África Subsahariana, dice:
“Trabajar en condiciones de intermediación laboral, que es tratar a los trabajadores como mercancías desechables, es una situación difícil para ellos, pueden perder su empleo en cualquier momento. Cuando eso sucede no tienen ninguna prestación para poder recuperarse. Por lo tanto, pedimos que se ponga fin a las condiciones de trabajo precario y que se apoye el trabajo decente y salarios dignos.”