4 septiembre, 2013El Sindicato Interregional de Trabajadores del Sector Automotriz (ITUA), organización afiliada a IndustriALL, y varios otros sindicatos rusos afiliados a la Confederación del Trabajo de Rusia han lanzado una nueva campaña “¡Exigimos aumentos de sueldos!”.
El 31 de agosto y 1º de septiembre, los sindicatos de doce ciudades de Rusia se movilizaron para exigir mejoras salariales. La campaña “¡Exigimos aumentos de sueldos!” fue lanzada por la Confederación del Trabajo de Rusia.
El ITUA llevó a los trabajadores de la Ford y de Antolin a la manifestación en San Petersburgo. Los manifestantes exigieron ajustes salariales regulares, y que el Código del Trabajo de Rusia establezca reglas claras respecto a la indexación de los salarios.
El 1º de septiembre, se realizó otra manifestación en Kaluga, donde el ITUA movilizó a los trabajadores de Volkswagen, Benteler y de otras plantas.
Dmitry Kozhnev, activista del ITUA en Kaluga, dijo que era “evidente que los trabajadores enfrentan el problema de la defensa de sus propios intereses, de la organización sindical, y ahora, en el período previo a la crisis, la situación se presenta aún más grave que nunca. En momentos en que se han probado medidas como el abandono parcial del Código de Trabajo, enfrentamos una difícil dicotomía: resistir o que nos aplasten por completo.
“La cuestión del ajuste salarial es de vital importancia. Aunque en algunas fábricas de Kaluga a comienzos del año habían aumentado los sueldos en un 7 por ciento, de acuerdo a las cifras de la inflación, sin embargo los precios y los servicios públicos básicos subieron de 8 a 15 por ciento: esto hace que las comunidades sean simplemente saqueadas por las élites financieras e industriales”, agregó Kozhnev.
Esta campaña de acciones se lleva a cabo dentro del marco de la cumbre del G-20 en San Petersburgo, que comenzó el 5 de septiembre. Los sindicatos exigen un ajuste salarial equitativo, un mejor equilibrio entre la parte permanente y variable de los sueldos, y sanciones más severas para aquellas empresas que se nieguen a firmar contratos de trabajo formales.