17 enero, 2019La UGTT (Union Générale Tunisienne du Travail), confederación sindical de Túnez, ha decidido hoy declarar la huelga en la administración del estado y el sector público del país, por no haberse logrado acuerdo con el gobierno para un aumento salarial.
Esta huelga, que involucra a 670,000 trabajadores y trabajadoras, se produce después del paro de 24 horas que se llevó a cabo en noviembre de 2018. La protesta afecta a aeropuertos, puertos, escuelas, hospitales, medios de comunicación estatales y oficinas del gobierno; se han suspendido muchos vuelos de Tunisair. Los salarios no han logrado mantenerse al día con el aumento de los precios, produciendo una reducción del poder adquisitivo de la población.
La UGTT informó ayer que la huelga anunciada se realizará después de “difíciles” negociaciones que consistieron en más de 100 sesiones. A pesar de las concesiones que la UGTT ofrecía, el gobierno, por el contrario, “insistió porfiadamente en no abordar los principales problemas económicos y sociales, como la evasión fiscal, el enorme déficit de los fondos de seguridad social, la economía informal, la inflación y la disminución del poder adquisitivo de los tunecinos”.
El gobierno señaló que no podía aceptar aumentos salariales debido a su compromiso con el Fondo Monetario Internacional (FMI) que le obliga a recortar los gastos públicos y a equilibrar el presupuesto. Túnez recibe ayuda vital del FMI que está sujeta a reformas económicas.
Durante las negociaciones, la delegación del gobierno se retiró muchas veces para consultar con el FMI, a miles de kilómetros de distancia, lo que llevó a algunos en la UGTT a proponer que el sindicato entablara negociaciones directamente con el FMI, en vista de la falta de capacidad del gobierno. La UGTT afirma que el gobierno está recibiendo órdenes del FMI, que ha demostrado poco interés en abordar los problemas de crucial importancia, y que carece de una amplia visión económica y social.
La UGTT rechazó una oferta del gobierno de un aumento salarial mensual de 80 dinares ($ 27): por lo contrario, la federación sindical exige un aumento de 270 dinares ($ 91). El 16 de enero, un intento de última hora de superar el impasse sólo duró unos minutos.
En una carta dirigida a la UGTT y a los sindicatos afiliados a IndustriALL Global Union, el Secretario General Valter Sanches señaló:
“Es lamentable saber que las negociaciones de última hora con el gobierno no hayan llegado a ningún acuerdo sobre el aumento salarial para los trabajadores y trabajadoras del sector público.
“Compartimos con la UGTT la firme convicción de que los trabajadores y trabajadoras del sector público tienen derecho y merecen un aumento salarial decente, semejante a los acuerdos que se han establecido con el sector privado y con la fuerza de trabajo de empresas estatales. Los trabajadores y trabajadoras del sector público enfrentan los mismos problemas, ya que el poder adquisitivo se deteriora rápidamente debido al alza de los precios”.