21 julio, 2022Al tiempo que disminuye la producción destinada a la exportación, los trabajadores de Sri Lanka están luchando por adquirir productos básicos esenciales. Los afiliados de IndustriALL en el país exigen reformas constitucionales a favor de la estabilidad política y la democracia.
Los trabajadores de Sri Lanka han estado luchando por procurar alimentos, combustible y otros productos esenciales necesarios para sobrevivir desde principios de año. La escasez se ha visto exacerbada por la guerra en Ucrania. Según los informes, alrededor de 13 personas murieron mientras hacían cola para conseguir combustible. Estas carencias han interrumpido todo tipo de servicios, incluido el transporte público, lo que dificulta que los trabajadores se presenten a trabajar a tiempo.
Los cortes eléctricos y la falta de combustible también han provocado un descenso considerable en la producción destinada a la exportación. Las empresas de producción de mediana escala no han podido completar sus pedidos, al tiempo que las marcas internacionales que suelen abastecerse en el país se han mostrado renuentes a realizar nuevos encargos.
A pesar de todas estas dificultades, el pueblo de Sri Lanka ha demostrado un enorme coraje al manifestarse contra un Gobierno represivo y corrupto. En estos meses, la población se ha enfrentado a la violencia de la policía, que suele lanzar gas lacrimógeno.
Los afiliados esrilanqueses reclaman la abolición de la presidencia ejecutiva en el país. Otras demandas incluyen que el departamento de policía se convierta en un departamento civil independiente y se coloque bajo la esfera del Ministerio del Interior; que se modifique la Ley de Declaración de Activos y Pasivos; que el combustible, el gas y otros productos esenciales se suministren a precios asequibles para los trabajadores; que el acuerdo hecho con el Fondo Monetario Internacional se haga público antes de recibir un aval oficial y que se derogue la Ley de Prevención del Terrorismo.
Después de que el expresidente Gotabaya Rajapaksa renunciara y huyera del país, Ranil Wikramasinghe fue elegido como el nuevo mandatario en las elecciones del 20 de julio. Todavía no se ha formado un gobierno provisional.
Anton Marcus, secretario general del Sindicato de Empleados de Zonas Francas y Servicios Generales, afiliado a IndustriALL, expresó:
“La instauración de un gobierno democrático estable es crucial para atraer a los inversionistas y mantener el proceso de producción, sin el cual el país seguirá sufriendo”.
El secretario general de IndustriALL, Atle Høie, afirmó:
“Apoyamos las demandas de nuestros afiliados de Sri Lanka a favor de reformas constitucionales y extendemos la solidaridad de todos nuestros miembros a nivel mundial. Estamos con los trabajadores de Sri Lanka en este momento difícil”.