Read this article in:
Español
25 mayo, 2017Miles de trabajadores invaden las calles de Brasil y Argentina en reclamo de sus derechos laborales y crecen las tensiones con sus respectivos gobiernos
Brasilia se transformó en un campo de batalla el 24 de mayo. La marcha pacífica que promovieron las centrales sindicales de Brasil se tiñó de violencia luego de que el Gobierno de Michel Temer empleara las Fuerzas Armadas.
100.000 trabajadores respondieron al llamado de las centrales sindicales para “Ocupar” la capital federal de Brasil. El objetivo era defender los derechos, rechazar la reforma laboral y de pensiones, y reclamar elecciones directas.
En medio del escándalo político que rodea a Temer por estar bajo sospecha de cometer graves delitos de corrupción, decidió firmar un decreto para autorizar el empleo de las Fuerzas Armadas a fin de “Garantizar la Ley y el Orden del Distrito Federal”, desde el 24 hasta el 31 de mayo.
La medida fue duramente criticada por los sindicatos y también por las autoridades de diversos partidos políticos. Incluso, el Consejo Nacional de Derechos Humanos (CNDH) de Brasil expresó su rechazo "al uso de las Fuerzas Armadas para reprimir la legítima manifestación de movimientos sociales (...) contra la supresión de derechos constitucionalmente garantizados”.
En tanto, los trabajadores de Argentina también salieron a las calles para reclamar sus derechos. Los metalúrgicos marcharon por las calles de Buenos Aires el 17 y el 22 de mayo. En ambas oportunidades, cientos de personas expresaron la necesidad de establecer un 30% de aumento salarial en los convenios colectivos de trabajo.
La Unión Obrera Metalúrgica de Argentina (UOM, afiliada a IndustriALL Global Union) asegura que los trabajadores del sector tienen un salario promedio de 10.000 pesos argentinos (630 dólares aproximadamente) y necesitan dicho porcentaje de aumento para poder estar por encima de la línea de pobreza.
El 22 de mayo finalizó la conciliación obligatoria dictada por el Ministerio de Trabajo para establecer el porcentaje de aumento salarial. Como las autoridades de la UOM y las cámaras empresariales no alcanzaron un acuerdo, el Ministerio prorrogó la conciliación hasta el 30 de Mayo. El gremio dijo que si no logran firmar un acuerdo satisfactorio para los trabajadores retomarán el plan de lucha.
En la reunión del Comité Ejecutivo de IndustriALL Global Union de abril en Ginebra se aprobaron resoluciones de solidaridad sindical internacional con los trabajadores de Brasil y Argentina. En ambos documentos denunciaron los ataques a los derechos fruto de las propuestas de reformas laborales de Temer y el ajuste económico del presidente argentino Mauricio Macri, y apoyaron las acciones emprendidas por los trabajadores.
El director de IndustriALL, Fernando Lopes, se refirió a las medidas de lucha en ambos países y expresó:
“IndustriALL apoya las movilizaciones promovidas tanto por una de sus afiliadas, como la UOM, así como también la participación de las afiliadas en movilizaciones más generales convocadas por centrales sindicales o frente populares, como en el caso de Brasilia.
Repudiamos vehementemente la violencia militar contra los manifestantes. Manifestar no es un crimen, ¡es un derecho!”